El alquiler en las zonas más pobladas del país es desorbitado para muchos

Huelva/En España la tendencia relativa a los precios de la vivienda no sigue el mismo curso que en Huelva. Con un coste medio de 1.698 euros por metro cuadrado en agosto de 2019, el país experimentó una subida del 5,32% con respecto al año anterior.

En este sentido, según Ferran Font, director de Estudios de pisos.com, “los precios han levantado el pie del acelerador, pero todavía es necesario impulsar el volcado de oferta para que las zonas que han encabezado los repuntes este año se enfríen”. De este modo, se podría hablar de la posibilidad de que España se adentrara en una fase de estancamiento en el caso de que la concesión de licencias no se agilice, pues según el experto, “esto es un elemento clave para que la actividad inmobiliaria no pierda dinamismo”.

Así, se espera que la demanda solvente tenga más productos a su disposición dado que “el endeudamiento excesivo está bajo control gracias a la prudencia con la que opera actualmente el sector bancario”.

Ferran Font ha querido también contextualizar a la población española, pues existe una amplia mayoría que se encuentra en “tierra de nadie”. En este grupo de personas figuran todas aquellas cuyas rentas están fuera del ámbito de la vivienda pública, pero cuentan con un nivel de ingresos que se antoja insuficiente para acometer los pagos que los bancos no financian. De este modo, la capacidad de ahorro se ve muy afectada de cara a la posible contratación de una hipoteca.

Mientras en Huelva el precio medio del metro cuadrado se situaba en el mes de agosto en 1.134 euros, San Sebastián se erigía como la capital más cara para adquirir una vivienda en propiedad, con 4.582 euros por metro cuadrado. Igualmente, con 3.964 y 3.222 euros por metro cuadrado respectivamente, Madrid y Bilbao completan el podio de ciudades más caras para disponer de casa propia.

Así, en las localidades donde la demanda es superior a la oferta, “se está rozando el techo de las subidas”, según Font, quien sostiene que el margen para subidas en ciertos barrios es “mínimo o, incluso, no hay”. De esta manera, no sería conveniente que las familias volvieran a endeudarse por encima de sus posibilidades como ya sucediera en 2008 cuando se desató la crisis inmobiliaria.

El director de este portal sostiene también que el hecho de que precios y sueldo sean incompatibles puede propiciar que el sector cierre el ciclo expansivo para terminar estancándose.

Igualmente, tal y como apunta el portavoz de este portal inmobiliario, el mercado del alquiler no resulta sencillo para los españoles en aquellas ciudades donde las cifras de población son elevadas, pues “las mensualidades que exigen los propietarios están disparadas”.

Por tanto, con tales datos resulta muy necesaria la actuación del Gobierno con ánimo de inyectar dinero público en este sector, pues “es importante rehabilitar el sector y ofrecer precios más asequibles a los que necesiten alquilar una vivienda.