Huelva está en puestos de cabeza en demoras de asistencia hospitalaria

Prueba diagnóstica en el Juan Ramón Jiménez. / H.I.

Huelva/La provincia de Huelva se sitúa en los puestos de cabeza en lo que respecta a los tiempos de espera o demoras, para las asistencias garantizadas por el Servicio Andaluz de Salud (SAS). Así lo denuncia la Asociación Huelva, por una sanidad digna quien, estudiando los datos oficiales emitidos por el propio SAS recientemente, indica que la provincia onubense ocupa el segundo lugar en las demoras más prolongadas respecto a intervenciones quirúrgicas y en primera consulta, en ambos casos tras Granada y el tercero en el de las pruebas diagnósticas, después de Granada y Málaga.

En concreto según recuerda Huelva, por una sanidad digna la provincia tiene casi 4.000 pacientes con los que se están incumpliendo los decretos de garantias en primera consulta y pruebas complementarias. Respecto a los que están pendientes de una respuesta quirúrgica, hay 3.797 con una demora media de 77 días, 4 más que la media andaluza.

La asociación denuncia de este modo, que Junta de Andalucía “incumple” el Decreto de Garantías en materia sanitaria con un total de 40.218 pacientes en toda Andalucía, según se desprende de los últimos datos sobre listas de espera hechos públicos.

Su presidenta, Paloma Hergueta, ha precisado que las cifras “evidencian y demuestran, una vez más, que Granada y Huelva –afectadas por las fusiones hospitalarias– son las que se encuentran en la peor situación”. La plataforma se pregunta por qué se creó el Decreto de Garantías “a sabiendas de que se iba a incumplir” algo que, según ha señalado, viene sucediendo “sistemáticamente” desde 2013.

Por último, ha lamentado que pese a la mejoría anunciada por la Consejería de Salud, las listas de espera del SAS en general hayan aumentado en 26.033 pacientes en Andalucía, pasando de los 310.212 en el año 2017 a 336.245 pacientes en 2018, solo con fecha hasta junio. Asimismo, se resalta que los datos se han hecho públicos tras las elecciones del 2 de diciembre “para que no les afectara en votos”. Se añade desde esta asociación que “con premisas como que las cifras aportadas son medias (no demoras máximas), las estadísticas están maquilladas”.

Las mejoras solo afectan a cirugía

Los datos que recientemente ha hecho públicos la Consejería de Salud presentan claroscuros en la dinámica de la atención hospitalaria onubense. En algunas facetas se progresa y en otras hay un cierto estancamiento cuando no un retroceso evidente. En el primero de los casos, se sitúan las intervenciones quirúrgicas en las que hay diferentes plazos normativos de respuesta dependiendo de la naturaleza de la operación que ha de efectuarse. Los datos indican que en junio del 2018 había 3.797 onubense a la espera de una intervención con una demora de 77 días.

Esto supone una mejora más que sustanciosa respecto a la situación que se presentaba dos años antes. En junio de 2016 había nada menos que 6.689 pacientes onubenses a la espera de una operación. Ya en 2017 hubo una corrección de estos escalofriantes datos pues la cifra bajó a 4.374 con una demora de 102 días. Las cosas no han ido tan bien en los otros dos campos en los que la Junta de Andalucía mantiene un compromiso de respuesta asistencial con sus usuarios. En cuanto a la primera consulta de las diferentes especialidades médicas, en junio de 2018 había 15.243 pacientes inscritos en el Registro de Consultas Externas con una demora media de 61 días. El deterioro se constata teniendo presentes las cifras de junio de 2017.

Éstas dicen que en ese registro había 12.317 usuarios onubenses con una demora de 50 días. Los datos fueron muy parecidos en el calamitoso 2016. Finalmente, en el ámbito de las pruebas diagnósticas, junio de 2018 señala un global de 2.022 personas en espera, con una demora media de 24 días.

En ese mismo mes de 2017, los usuarios en lista de espera eran 1.360 con una demora de 37 días. En ese mismo mes de 2016, los usuarios ascendieron hasta la cifra de 2.938 que sin embargo, tuvieron una demora media de 21 días. Dentro de estas pruebas, la que más carga asistencial presenta es la de la radiología simple que acumula prácticamente la mitad del cómputo general.