La desconfianza en el sistema merma un 8,5% las denuncias por violencia machista en la provincia

Huelva/"Cuando la víctima de la violencia de género no acude al médico, a la Guardia Civil, a la Policía o al juzgado, tenemos que plantearnos si estamos generando en ella la confianza suficiente". Con esta frase lapidaria el titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer 1 de Huelva, el magistrado Ricardo Rodríguez Ruiz, reflexiona sobre los datos estadísticos recabados por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y a los que ha accedido Huelva Información: en el primer semestre de este año las denuncias por violencia machista se redujeron un 8,5% en la provincia pasando, de las 1.171 de 2018 a las 1.071 de ahora.

Rodríguez Ruiz apunta, no obstante, "a que al menos en mi juzgado se están compensando los datos en la segunda mitad del año, por lo que lo acabaremos en cifras muy similares" a las del ejercicio precedente. Estas cifras del CGPJ radiografían toda la provincia, donde los juzgados especializados en la materia son el Ayamonte 3, La Palma del Condado 3, Aracena 1, Valverde 1 y Moguer 1, Penal 3, Sección Tercera de la Audiencia y Violencia 1 de Huelva.

Solo cuatro mujeres presentaron directamente la denuncia en el juzgado, cinco menos que un año atrás, pero sí impulsaron con sus delaciones 899 atestados policiales, ocho más.

La gran asignatura pendiente sigue estando en el entorno más cercano de la mujer maltratada. Únicamente ocho familiares presentaron denuncia por los ilícitos de violencia machista.

La intervención policial directa en los casos también ha registrado una mengua, fluctuando de los 71 casos de 2018 a los 43 de ahora, el 39,4% menos.

Esta tendencia a la baja es interpretada por el magistrado Ricardo Rodríguez Ruiz como "algo estacional". Pero reconoce que cada uno de los intervinientes, cada engranaje del sistema, debería hacer un análisis, una reflexión profunda de por qué las mujeres ahora denuncian menos. Porque también se han rebajado los partes de lesiones que los sanitarios remiten a los juzgados, solo 102 frente a los 140 del primer semestre del pasado ejercicio, una caída del 27,1%.

En consecuencia, el número de víctimas contabilizadas ha menguado: pasan de 1.159 a 979, el 15,5% menos. Algo más de siete de cada diez son españolas, 718; el 26,7%, 261, tiene nacionalidad extranjera.

En total 251 mujeres solicitaron órdenes de protección a los jueces. La judicatura adoptó 188 de ellas (el 74,9%) y denegó 45. En otros 11 casos fue la Fiscalía la encargada de reclamarlas, de las que diez fueron concedidas y una denegada.

Las mujeres españolas adultas que fueron objeto de estas solicitudes hasta junio son 166, el 40% menos, y las extranjeras han sido 95, 17 menos.

En este apartado llama la atención que en la primera mitad del año pasado 16 menores reclamaran una orden de protección (13 españolas y 3 extranjeras) y en el ejercicio en curso solo ha habido una, de nacionalidad española.

El magistrado observa que puede deberse a que "el concepto de violencia de género en sí se está poniendo en tela de juicio y las menores son más permeables a estos mensajes", que les llegan de forma directa a través de las redes sociales y las reprimen a la hora de pedir ayuda y denunciar. "Es algo que está vigente en la sociedad, lamentablemente, y ahora se duda de todo; con las mayores es distinto porque suelen tener más criterio", subraya Rodríguez Ruiz.

Los datos del CGPJ indica que de enero a junio ha habido en Huelva 203 hombres enjuiciados por violencia machista. El 76,8% de los 177 que fueron condenados era español, 136. Los absueltos resultaron ser 26, el 44,7% menos que en 2018.

El dato positivo está en que cada vez son menos los asuntos en los que la víctima se acoge a la dispensa a la obligación a declarar como testigo contra su agresor, solo seis frente a las 31 de hace un año, el -80,6%.