Encuentros con la “chica de la curva” de Aracena

Huelva/En muchas ocasiones son los testigos que me informan de casos vivido en primera persona los protagonistas de los casos que van surgiendo día a día. En mucho de ellos el investigador solo puede remitirse al testimonio de los mismos y dar “voz” a su experiencia más allá de una investigación que pueda aportar más datos al respecto,

Mis dos primeros testigos me confesaban: “Eran las doce y cuarto de la noche, y el coche e íbamos por la carretera de Aracena a Sevilla. De pronto, al salir de una curva, una figura se materializó en el arcén. Era una chica joven, vestida con una camisa clara… Caminaba con lentitud, su cabeza gacha, como sumida en una profunda tristeza. Al percatarse del vehículo, levantó la mirada” decía Ana.

Prosiguiendo con su experiencia me comentaba: “En un gesto que heló la sangre a Carlos y a mi, la figura alzó los brazos y se lanzó hacia adelante, como si quisiera arrojarse bajo las ruedas del coche. El corazón se nos paró… Carlos, con un grito ahogado, pisó el freno hasta el fondo. El coche chirrió y se detuvo a escasos metros de donde la figura había desaparecido. Atemorizados, ambos nos bajamos del coche y miramos la carretera pero no había rastro de la chica”.

Aquella noche, el viaje que debería haber sido tranquilo se convirtió en una pesadilla. Ana y Carlos no podían quitarse de la cabeza la imagen de aquella chica, su mirada perdida y su gesto desesperado. Al llegar a Sevilla, buscaron información sobre ese tramo de carretera y descubrieron que no eran los únicos que habían tenido experiencias similares.

Vecinos de los pueblos cercanos relataban haber visto sombras vagando por la carretera, luces extrañas que se movían sin rumbo y figuras fantasmales que aparecían y desaparecían de repente. Algunos aseguran que se tratan de los espíritus de viajeros que habían perdido la vida en accidentes, aunque con una visión más de superstición que de realidad.

Ana y Carlos, escépticos por naturaleza, se vieron obligados a reconsiderar sus creencias. ¿Acaso eran posibles las apariciones? ¿Existía una explicación racional para lo que habían visto? O, ¿quizás, la realidad era mucho más compleja y misteriosa de lo que imaginaban?

Desde aquella noche, cada vez que recorren esta carretera, Ana y Carlos no pueden evitar sentir un escalofrío. La imagen de la chica sigue persiguiéndoles, recordándoles que en algunos lugares, la frontera entre el mundo de los vivos y el de los muertos puede ser más difusa de lo que creemos.

Otra experiencia

En el año 2021, varios conductores aseguraron haber tenido encuentros escalofriantes en ese mismo tramo donde Ana y Carlos habían presenciado la aparición fantasmal.

Uno de los testimonios más impactantes provino de un joven camionero que solía recorrer esa ruta con frecuencia. Según relataba, una noche oscura y lluviosa, mientras descendía por una de las cuestas más pronunciadas, vio una figura femenina de pie en medio de la carretera. Aterrorizado, frenó bruscamente y esquivó por los pelos la supuesta aparición. Al salir del vehículo para comprobar si se había producido algún accidente, no encontró nada. La figura había desaparecido sin dejar rastro.

Otro caso que causó gran revuelo fue el de una pareja que regresaba de una fiesta. Al pasar por el tramo en cuestión, vieron a una mujer vestida de blanco que caminaba por el arcén. La chica llevaba el cabello largo y suelto. La pareja decidió detenerse para ofrecerle ayuda, pero al acercarse, la mujer se desvaneció en la oscuridad.

Estos y otros muchos testimonios similares comenzaron a tejer una leyenda negra en torno a ese tramo de carretera. Los más supersticiosos, hablaban de maldiciones antiguas y de energías oscuras que habitaban el lugar.

Muchos conductores, al pasar por ese tramo, no podían evitar sentir un escalofrío y mirar con recelo hacia los lados, temiendo encontrarse con alguna aparición fantasmal.

*Si has vivido alguna experiencia extraña no dudes en escribirnos y contárnosla a correo@garciabautista.net