Finaliza la primera sesión del juicio al menor acusado de matar de una paliza a un anciano en Rociana del Condado

Huelva/Finaliza la primera sesión del juicio por la muerte de un anciano de 75 años el pasado febrero en una farmacia de la calle Hinojos de Rociana del Condado, de la que está acusado el hijo -como menor de edad, pues en aquel momento no había cumplido los 18 años- del hombre al que, cuatro años antes, había asesinado este mismo anciano. Cabe recordar el asesinato de un hombre en un huerto de Rociana en mayo de 2020, del que fue testigo su hijo de 14 años -el actual acusado-. Cuatro años después, el chico fue detenido por la paliza que propinó el pasado 29 de febrero al anciano de 75 años condenado por el asesinato de su padre. La víctima no sobrevivió y fallecería días después, según confirmaron fuentes del caso.

A primera hora de la mañana de este lunes comenzaba el juicio, que se prolongará hasta este mismo martes, jornada reservada para las pruebas periciales, la declaración del acusado y las conclusiones, según informan fuentes judiciales. Los testigos, entre los que se encontraban cuatro dependientes de la farmacia en la que se produjo el suceso, dos agentes de la Policía Local y dos de la Guardia Civil, declararon este lunes. También lo hizo el hijo del anciano fallecido, José García, quien sigue defendiendo que se trata de un "acción vengativa".

En declaraciones a Huelva Información, García insistió en que considera el suceso una venganza por el crimen de hacía cuatro años. La víctima fue condenada hace algo más de un año por la Audiencia de Huelva por un delito de asesinato con la atenuante analógica de confesión, después de que disparara a una persona -al padre del menor- a la que sorprendió en su huerto y de la que sospechaba era la autora de diferentes sustracciones de las que había sido objeto en el mismo. El hombre, según explica su hijo, quedó exento de cumplir la pena de prisión por los problemas médicos que presentaba, si bien tenía que acudir a firmar al cuartel de la Guardia Civil todos los lunes. "Mi padre padecía alzhéimer, no conocía a nadie y así lo decían los médicos", declaraba el hijo, tal y como confirma posteriormente a este diario.

Del mismo modo, García recuerda la "inseguridad" que vivía su familia por "las amenazas directas desde el asesinato". Una inseguridad que a día de hoy todavía asegura sentir porque, pese a que "cesaron los capítulos de amenaza hacia mí, el otro día, por ejemplo, un familiar escupió a los pies de mi hija. Es como si me estuvieran buscando".

Contra la acusación de asesinato, la defensa del joven pide la consideración de homicidio, algo que se determinará una vez salga la sentencia, prevista para los próximos días. Igualmente, subrayan el estado de alteración psicológica de un joven al que le marca haber presenciado la muerte de su padre. "En todo caso se tienen que tener en cuenta las condiciones en las que se produjo el suceso, y lo equiparamos a un estado de obcecación", añade la defensa.

Un hombre de avanzada edad fallecía poco después de una paliza en una farmacia

La agresión al anciano de 75 años, según confirmaron fuentes de la Guardia Civil, se produjo a finales de febrero en las inmediaciones de una farmacia de la calle Hinojos de Rociana del Condado y, días después, el entonces menor fue detenido y puesto a disposición de la Fiscalía de Menores, decretándose su ingreso en el centro.

Semanas después del brutal ataque, el hombre de avanzada edad falleció. Este trágico suceso provocó un cruce de versiones entre ambas familias. Lo que para unos era una "acción vengativa" para otros respondía a "un hecho no intencionado provocado por un menor con un estado psicológico alterado", según subrayaban a esta redacción unos y otros. De hecho, el entorno familiar del joven rechazaba que se hubiesen producido estas amenazas, pese a reconocer que "sí que estábamos doloridos, pero nunca amenazamos".

Cuatro años después del asesinato de 2020

Sobre el caso de 2020, cabe recordar que hace un año la Audiencia Provincial de Huelva condenó a 15 años de cárcel a este hombre acusado de asesinar de un disparo de escopeta al padre del joven en un huerto de su propiedad ubicado en Rociana del Condado al “sospechar” que el fallecido había entrado en dicho lugar a robar, todo ello tras el veredicto de culpabilidad emitido por un jurado popular en relación a unos hechos ocurridos en el mes de mayo de 2020.

De conformidad a los términos del veredicto emitido por el jurado popular, se declaraba probado que los hechos tuvieron lugar sobre las 14:30 del día 5 de mayo de 2020, cuando el acusado se encontraba “escondido y armado con una escopeta” en un paraje tenía el huerto de su propiedad". En este sentido, el condenado “tenía sospechas de que el autor de las sustracciones” era el finalmente fallecido y de que “algunos días se acercaba sobre esa hora a la parcela”, por lo que “se apostó escondido y armado con una escopeta en las inmediaciones de su parcela”, según recoge la sentencia.

Sobre la hora referida, el acusado, con licencia de armas tipo E, comprobó que la víctima había accedido al interior de la parcela en compañía de otra persona y que “arrancaba algunas vainas de habas sembradas”, de forma que “se dirigió sin ser visto desde el exterior de la valla” al fallecido y, “tras mediar unas breves palabras con éste, a sabiendas de la probabilidad de que pudiera causarse la muerte o al menos consciente de que ponía en peligro su vida y aceptaba ese resultado”, efectuó de frente un disparo a una distancia de entre tres y cinco metros que impactó en la cara de la víctima mientras su acompañante -su hijo- huía del lugar a la carrera.

El hijo del anciano sostenía que en reiteradas ocasiones trató de armar el relato con su padre, "pero su alzhéimer hace que no se acuerde de nada, solo del breve segundo del disparo".