Uno de cada dos habitantes de Huelva viven en zonas con un índice de vegetación inferior al que se recomienda

Huelva/La necesidad de plantar árboles en las ciudades es un debate que toma aún más peso en momentos del año en los que el insoportable calor de Huelva imposibilita las largas caminatas por la ciudad. Y no es el único motivo. Las zonas verdes contribuyen a la lucha contra la contaminación atmosférica y, por ende, evitan un número importante de muertes al año.

El 55,14% de la población que habita en Huelva vive en zonas con un índice de vegetación inferior al que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Es un porcentaje que se extrae del Estudio de Salud Urbana en 1.000 ciudades europeas, del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal). Supone un porcentaje importante, si bien Huelva es la segunda capital de provincia andaluza con mejores datos, solo superada por Jaén, donde el 53,01% de los habitantes residen en zonas con el índice de vegetación menor al recomendado.

Los porcentajes más elevados, según el referido estudio, los arrastran Cádiz (97,17%), Granada (77,80%) y Sevilla (74,00%).

Ante ello, el objetivo del Ayuntamiento de Huelva, según han trasladado a este diario, es el de aumentar la vegetación en la ciudad. De ahí que, aseguran fuentes del Consistorio, todas las obras en curso que admitían modificación han recibido un incremento del arbolado y zonas verdes; mientras que toda la planificación urbanística de cara a los próximos años incorpora "obligatoriamente" un plan de arbolado.

La implantación de zonas verdes resulta fundamental si se quieren evitar muertes asociadas a la contaminación o a las altas temperaturas. De cumplirse con lo recomendado por la OMS (deben haber espacios verdes de al menos 0,5 hectáreas accesibles a una distancia lineal de 300 metros desde cada domicilio), la estimación es que podrían evitarse una decena de muertes en Huelva cada año.

Ahora bien, la problemática que tiene Huelva pasa más por la distribución de las zonas verdes que por la cantidad de la misma, dado que el Índice de Vegetación de Diferencia Normalizada (NDVI por sus siglas en inglés) de la capital onubense (0,239) supera al recomendado (0,213). Este indicador mide cómo de verde es un área y Huelva supera la recomendación. De hecho, en comparación con el resto de ciudades analizadas, la onubense presenta datos positivos, pues es la 801 de 866, entendiéndose que la primera es la que tiene una peor valoración y la última la que posee la mejor valoración.

Otro de los indicadores que mide el estudio del Instituto de Salud Global de Barcelona es el relativo a las zonas verdes, que no es lo mismo que el índice de vegetación: es la superficie del terreno definida como zona verde. Huelva presenta aquí un porcentaje del 37,1% y supera ampliamente el del 25% recomendado por la OMS.

Pese a ello, la distribución de las mismas se traduce en que el 53,44% de los habitantes de la capital onubense vivan en zonas que no alcanzan ese 25% recomendado. Nuevamente, es más de la mitad de la población. Huelva baja, en este sentido, a la posición 711 del ránking de ciudades analizadas y, de cumplirse todas las recomendaciones de la OMS, se estarían evitando seis muerte por año.

Contaminación acústica y del aire

El Instituto de Salud Global de Barcelona estudia otros parámetros asociados a la salud urbana en las ciudades europeas, como la contaminación del aire y el ruido del tráfico. Concretamente, en Huelva nueve de cada diez habitantes están expuestos a un nivel de ruido superior a los 55 decibelios, considerado por la OMS como el límite para hablar de riesgo perjudicial. Y, según el mencionado estudio, el 17% de los onubenses "están molestos con el ruido ocasionado por el tráfico en la ciudad". Las muertes prevenibles al año si se cumplen las recomendaciones de la OMS se elevan a cinco.

En lo que se refiere a la contaminación del aire, considerada como una de las principales causas de muerte y enfermedad en el mundo, Huelva suspende las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud. La OMS considera que las partículas en suspensión deberían ser de menos de cinco microgramos por metro cúbico, mientras que en Huelva se elevan a 12,5 de media anual -el límite máximo marcado por Europa es de 25-. Si la calidad del aire fuera la recomendada, la OMS cifra en 56 las muertes evitables cada año en la ciudad.

Del mismo modo, si nos atenemos al dióxido de nitrógeno, gas tóxico e irritante que afecta al sistema respiratorio, la media anual en Huelva es de 22,5 microgramos por metro cúbico, 12,5 puntos por encima de la recomendación. Hasta 27 muertes podrían evitarse si se cumplen las recomendaciones de la OMS.