La independencia de Fuenteheridos

300 AÑOS de autonomía la localidad fue aldea de aracena y galaroza

Vecinos del pueblo protagonizan la representación teatral del momento en que el pueblo consiguió la escisión de su antiguo municipio matriz La fiesta fue un éxito de público

La representación teatral en la plaza del pueblo decorada para la ocasión.
J. Moya Rufino Fuenteheridos

31 de agosto 2016 - 01:00

El 29 de agosto de 1716 fue un día histórico para Fuenteheridos al convertirse en villa independiente y no tener que depender de ningún otro pueblo, en aquel momento de Galaroza, cuando era su aldea y con anterioridad de Aracena. Eran tiempos de Felipe V, el primer monarca Borbón, y el enclave regía su actividad bajo las órdenes del Reino de Sevilla. Trescientos años después la historia, su gente, su arquitectura, su cultura y sus costumbres han cambiado de forma notable aunque en algunos aspectos la esencia y la forma de ser se mantiene muy viva.

El pasado lunes, también 29 de agosto, día de fiesta local en Fuenteheridos por ser la efemérides del Tricentenario de la independencia, el pueblo se echó a la calle y vivió una fiesta llena de historia y recuerdos con un gran trabajo de investigación. En este sentido cabe reseñar el trabajo del historiador e investigador serrano, natural y residente en Fuenteheridos, Rodolfo Recio.

La jornada fue intensa. Por la mañana hubo un repique de campanas que se repitió por la noche cuando eran las nueve en punto, como preludio de que algo grande iba a pasar. Precisamente tras el repique de campanas comenzó el discurrir de parte del cortejo congregado en la Plaza del Coso. Todos estaban encabezados por una simpática figura de un gigante, habitual en estos últimos años en las fiestas y algo tradicional en el pueblo papero, que anunciaba la fecha del 29 de agosto de 1716. Justo detrás, una de las grandes novedades de la noche, la aparición de miembros del recordado y querido grupo Almirez y además, también el único que cantaba junto al Coro de Fuenteheridos y otros miembros, el grupo de campanilleros denominado Solera Añeja.

Desde el balcón del Ayuntamiento dos concejales lanzaban tres cohetes para anunciar la previa a lo que sería una gran fiesta para la vecindad serrana. El cortejo se fue parando en diferentes lugares del recorrido, ya que el destino era la coqueta y singular Plaza Alta de Fuenteheridos. Allí se desarrollaron todas las actividades previstas. La plaza estaba adornada para la ocasión con colgaduras especiales y emulando la época de la independencia, tres siglos atrás, y junto a la fachada del antiguo Ayuntamiento y ahora Centro de Salud tenía lugar la representación teatral de la independencia.

La presentadora del acto, vecina del pueblo y también ataviada para la ocasión, indicaba todo lo que allí pasaba. Entre los figurantes destacaron algunos miembros de la primera corporación municipal con el primer alcalde de Fuenteheridos como pueblo libre, Agustín González Moreno, a la cabeza y que fue el valiente vecino que más luchó, junto a otros, frente a Galaroza por conseguir la independencia e incluso viajó a Madrid para ello. Esta figura fue representada por el actual alcalde, José Antonio Cortés.

El acto fue emocionante y muy significativo para todos los que se sienten vecinos de Fuenteheridos.

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