Los moguereños podrán conocer el nuevo espacio entre el 1 y el 6 de febrero

El Consistorio impulsa jornadas de puertas abiertas para que la ciudadanía se acerque al museo.

Los moguereños podrán conocer el nuevo espacio entre el 1 y el 6 de febrero
R. Rendón / Huelva

29 de enero 2011 - 01:00

Para hacer posible que todos los vecinos de Moguer puedan conocer de primera mano la remodelación de la casa natal de Juan Ramón Jiménez y su nuevo uso como museo (con una dedicatoria clara a la historia local), el Ayuntamiento celebrará desde el próximo martes y hasta el domingo 6 de febrero unas jornadas de puertas abiertas. Con esta estrategia se pretende lograr que los moguereños visiten este nuevo espacio museográfico municipal.

El edificio donde nació el Nobel de Literatura en 1881 está ubicado en la confluencia de la antigua calle de la Ribera con la de Las Flores (hoy, vía de Zenobia Camprubí, esposa de Juan Ramón). Su edificación fue realizada por un arquitecto sevillano a mediados del siglo XIX por expreso encargo del padre del poeta, Eustaquio Jiménez.

Allí se crió el literato hasta que su familia se trasladó -cuando apenas contaba con cuatro años de edad- a la vivienda de la calle Nueva, que a día de hoy constituye la casa museo de Juan Ramón.

El Consistorio moguereño adquirió el inmueble de la calle de la Ribera a mediados de la década de los 80 de la pasada centuria, rescatándola del ruinoso estado en el que se encontraba.

La Administración local emprendió una serie de obras de restauración y adecuación que permitieron que el edifico, ya en óptimas condiciones para su uso y disfrute, albergara aulas de formación, talleres de teatro y música.

También fue aquí, en esta maravillosa casa decimonónica, donde se instaló provisionalmente la sede de la Fundación Juan Ramón Jiménez y todos sus fondos entre 2003 y 2007, años en los que estuvo sometida a una restauración integral la casa museo de la calle Nueva.

Cuando la casa natal fue construida y en los años en los que fue habitada por la familia de Juan Ramón, la calle Ribera pertenecía a la zona más elevada de Moguer -también, entonces, la más noble-, desde donde podía dominarse la margen izquierda del río Tinto, lugar en el que estaba el puerto. Allí arribaban los mercantes que trasladaban los deliciosos caldos de la zona. La familia Jiménez se dedicaba a la producción y comercialización de vino, lo que justifica la selección del lugar en el que se establecieron.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último