El muro del recinto de la antigua cárcel de Huelva será derribado para integrarse en el barrio: la reforma del complejo se abre a las propuestas de los vecinos de Isla Chica y su entorno

La reforma de la antigua cárcel de Huelva está en marcha. El Ayuntamiento de Huelva está preparando un ambicioso proyecto para su rehabilitación integral y su integración en el entorno de Isla Chica, donde lleva años clausurada y en desuso. Este miércoles se presentó el planteamiento en el vecindario, en el Centro Municipal Lazareto, a pocos metros del recinto. Se hizo una declaración de intenciones del Gobierno local, se aclararon cuestiones y se abrió a la aportación de los propios vecinos, en un periodo de participación ciudadana en la que podrán definir el proyecto para acometer la intervención, que no se limitará al propio recinto de la antigua prisión. Como punto de partida, el muro exterior desaparecerá, el interior se hará permeable en el vecindario, integrado con nuevos espacios verdes, y la actuación se alargará a toda la barriada de Isla Chica y las colindantes, de forma que se actúe en un área habitado por más de 40.000 onubenses en la capital.

La ambiciosa intervención propuesta aspira a obtener 20 millones de euros de fondos europeos a través de la convocatoria de la antigua Edusi, ahora conocida como Plan de Actuación Integrado (PAI), según ha explicado el Ayuntamiento, en el contexto de la convocatoria para la asignación de la senda financiera Feder, en el marco del desarrollo urbano sostenible, con cargo al periodo de programación 2021-2027.

El plazo de esta convocatoria acaba el próximo 28 de febrero, por lo que en menos de un mes se cerrará el proyecto a presentar para Huelva capital, dentro de la modalidad Área Urbana de Gran Ciudad, para municipios que superan los 75.000 habitantes. En este caso, se centra en una superficie próxima al 30% de la ciudad, con más de 40.000 vecinos, entre Isla Chica y todo su área de influencia, delimitado el espacio por la Avenida de Andalucía, avenida Pío XII, la barriada de Pérez Cubillas y la calle Honduras.

El planteamiento inicial del Ayuntamiento de Huelva, según explicó a los vecinos en el Lazareto la alcaldesa, Pilar Miranda, es que todo ese área quede vertebrado por corredores verdes y se hagan diferentes intervenciones en los espacios públicos, como la eliminación de barreras arquitectónicas.

Fue una de las cuestiones planteadas en la reunión del miércoles. Los vecinos querían saber si el proyecto se limitará a la antigua prisión o a todo el vecindario, que da opciones a una rehabilitación e integración mucho más ambiciosa, con un mayor impacto.

Formulario para aportaciones

El periodo de participación ciudadana abierto pone ahora a disposición de los vecinos un formulario para realizar sus propuestas y aportaciones al proyecto. En los próximos días, según explicó la alcaldesa, se estudiarán las ideas que vayan llegando y se sumarán al documento a presentar.

“Hemos trabajado para poder acceder a la convocatoria con un proyecto abierto”, ha explicado Pilar Miranda. “Vamos a incluir las demandas de los vecinos, a partir de estas Jornadas de Participación Ciudadana, en las que se plantea un formulario abierto para recoger ideas y sugerencias, atendiendo dudas y comentarios en una escucha activa con el equipo de gobierno y los técnicos implicados”.

Las inversiones en esta actuación de la nueva PAI, destaca la alcaldesa, se centran en Isla Chica y su más amplio área de influencia, después de que la Edusi anteriormente se ocupara con proyectos e inversiones localizadas en el área del Noroeste-Centro de la ciudad, bajo el paraguas del sector Pulmón Verde-Parque Moret.

“Con la antigua cárcel e Isla Chica por bandera, queremos llevar a cabo un proyecto transformador del que se beneficie toda la ciudad, un proyecto abierto y participativo, con propuestas que respondan a las necesidades de los ciudadanos”, apunta Miranda.

De esta forma, asegura, “la rehabilitación de la antigua cárcel se convierte en protagonista de la transformación urbana y social de una zona que supone beneficiar directamente al 30% de la población y a todos los onubenses a nivel de ciudad”. Es un proyecto, subraya la regidora de Huelva,“transversal donde recuperamos patrimonio, mejoramos espacios, ampliamos zonas verdes y regeneramos todo el entorno”. Se trata de “la mejora del espacio urbano, la creación de corredores verdes y zonas para la dinamización y convivencia social incluyendo actuaciones de mejora en los centros municipales del Lazareto y Los Rosales, programas de formación y empleo, y medidas para el avance en la digitalización y la tecnología e la ciudad”. Tras estas intervenciones, destaca Pilar Miranda, está el objetivo de “mejorar la calidad de vida de los vecinos y avanzar en el objetivo de convertir a Huelva en la Capital Verde del Sur de Europa, para el progreso y el desarrollo de Huelva y los onubenses”.

Bajo estas directrices, la rehabilitación del edificio de la antigua cárcel se convierte en “el foco de atracción, con efecto tractor, para la revitalización de todo su entorno y de toda la ciudad”. “Vamos a tirar los muros de esa prisión para abrir todo el complejo a la ciudad, poniendo al servicio de los vecinos un nuevo pulmón verde, que tanta falta hace en esta zona de alta densidad y a su abrigo, dotaciones culturales y sociales, incluido un auditorio para la celebración de todo tipo de eventos, espacios dedicados a la innovación, a la formación, al desarrollo sostenible y a nuestra apuesta decidida por la economía circular”.

Lo importante, concluye la alcaldesa, “es llegar a un consenso con los vecinos a través de este modelo de participación con el que diseñar el proyecto final que se presentará para lograr la financiación necesaria, evitando actuaciones sin la aprobación de los vecinos o que no respondan a sus demandas reales, porque nosotros tenemos muy claro que la ciudad es de los ciudadanos, de quienes cada día viven sus calles y es por ello que hoy les damos voz para diseñar juntos nuestra propuesta”.