¿Por qué es “necesario y viable” un nuevo aeropuerto en Huelva?

Huelva/El acto de presentación de los nuevos accionistas de la sociedad que promueve el aeropuerto Cristóbal Colón fue también este jueves una reivindicación del proyecto en toda su extensión. El habitual cuestionamiento de la idoneidad de esta infraestructura para la provincia de Huelva fue respondido con un argumentario con el que los promotores defienden su iniciativa, que consideran “necesaria y viable” en Huelva.

La base de todo está en que es totalmente privada, con inversión 100% privada, igualmente, sin comprometer las arcas públicas. También se defiende la viabilidad del proyecto por sus dimensiones ajustadas y austeras, aunque suficientes para el tipo de vuelos que se prevé operar. Y se explica por qué no le valen a Huelva los dos aeropuertos existentes en un radio aproximado de cien kilómetros; y cómo el turismo no sería el único sector económico beneficiado.

Los principales argumentos esgrimidos por los promotores para defender la necesidad que tiene la provincia de Huelva de esta dotación y su viabilidad son múltiples y variados.

Ni Faro ni Sevilla

Uno de los principales es que los aeropuertos de Faro y Sevilla no son válidos para el turismo en Huelva. Los viajeros que llegan a través de vuelos de touroperadores a Faro (porque en Sevilla no operan) tardan en llegar una media de 3 horas a sus respectivos hoteles en autobús: hasta que no recoge todo el grupo sus maletas y suben al completo al vehículo, no parten hacia los hoteles, en los que se van parando en diferentes puntos de la costa, según las opciones de cada viajero. El viaje se hace más largo y con el inconveniente de volar a otro país para llegar a Huelva.

El ejemplo de Cádiz, destino similar al onubense, se toma también para una comparativa que invita a la reflexión, por la existencia de un aeródromo en Jerez de la Frontera, frente a la ausencia en Huelva. La provincia gaditana cuenta con un millón de turistas extranjeros al año, mientras en la onubense no se llega a 250.000, de los que unos 50.000 proceden de Portugal por cercanía y vecindad. Por tanto, los viajeros foráneos en Cádiz son cinco veces más que en Huelva.

Abierto al turismo

También se defiende que Huelva no se conoce al no tener vuelo directo. No aparece en recomendaciones ni publicidad de portales de viajes y hoteles en internet, al ni siquiera asociarse por proximidad a los vuelos buscados con Faro o Sevilla. Y en San Pablo tampoco vuelan touroperadores.

Los promotores están convencidos de que la construcción del aeropuerto no supondría la llegada de un turismo masivo, como en otras zonas. Además del limitado tráfico aéreo que se tendrá, Huelva cuenta a su favor con su condición de provincia con más superficie protegida de la península, lo que, defienden, garantiza un crecimiento sostenido del turismo que creciera asociado a la construcción del aeropuerto.

Sólo con éste, aseguran, se abriría la puerta de Huelva a la llegada de visitantes extranjeros, que sí conocerían de primera mano la riqueza de sus playas y sus espacios naturales, y otros valores del destino, desconocidos fuera, como la gastronomía, El Rocío, el Descubrimiento, su estrecho vínculo con el Reino Unido o su extraordinario pasado arqueológico. La apuesta por el turismo de calidad es una de las bazas que sostiene el proyecto del aeropuerto.

Otros sectores beneficiados

Aunque la viabilidad sólo con su influencia en el sector turístico estaría asegurada, según sus cálculos, el proyecto apunta también al sector primario y muy especialmente a la exportación de frutos rojos, de un modo rápido, directo y eficaz, recortando los tiempos de distribución en Europa y preservando, así, la calidad del producto que llega a los consumidores en diferentes países. 

La opción de compaginar turismo, mercancías y logística, defienden, eleva sus opciones de negocio, su rentabilidad y viabilidad. Los productores onubenses confían que sea una realidad pronto para contarlo como aliado.

Compatible con el AVE

“Todas las inversiones son buenas y necesarias, no hay que elegir entre una u otra”. Ni el AVE excluiría al aeropuerto, ni éste a la alta velocidad, nuevas carreteras o cualquier otro proyecto que no fueran dotaciones de comunicación para Huelva. Pero ésta sí se considera más factible y cercana en el tiempo: “Podemos tenerla en cuatro o cinco años”.

El hecho de que la provincia onubense sea, junto a Lugo, la única en España con costa pero sin aeropuerto, subrayan, es un claro hándicap competitivo frente al resto. Y con el añadido de que para la gallega no sea un agravio comparable al sufrido por Huelva por tener unas características muy diferentes como destino turístico. 

Sólo esto, apuntan, bastaría para reclamar la construcción de un aeropuerto público “con el mismo derecho que otras provincias”, pero la “inacción de las administraciones” es lo que llevó al planteamiento de un proyecto privado. “Aportamos nuestro patrimonio porque creemos en el potencial de Huelva”, recalcan; “y si a pesar de eso cuestionan la viabilidad del proyecto, que lo digan y lo hagan público”. 

A coste cero

La sociedad del Aeropuerto Cristóbal Colón insiste en las facilidades para la ejecución de esta infraestructura: podría ser una realidad en 5 años “con una inversión pública de 0 euros”, muy ventajosa en ese sentido frente al AVE, “en 15 años con una inversión pública de 1.200 millones de euros”, o el desdoble de la carretera N-435, “en más de 15 años con una inversión pública cercana a los 2.000 millones de euros”. 

Una revolución económica

Los cálculos que manejan los inversores del proyecto sostienen que el aeropuerto sería la infraestructura de comunicación “con más potencial revolucionador” para Huelva. De hecho se considera que tendría un impacto económico en la provincia de más de 1.000 millones de euros anuales.

El aeródromo contribuiría a acabar con el aislamiento de Huelva, que se refleja, aseguran, en el bajo PIB y las cifras altas de paro “pese a los grandes recursos de los que disponemos”.

“Infraestructura es igual a inversión e inversión es igual a empleo. Si queremos que nuestros hijos se queden en la provincia, tenemos que seguir desarrollándola y en Huelva llevamos más de 20 años parados”, esgrimen.

La sostenibilidad

Las dimensiones contenidas del proyecto, con muy pocos vuelos diarios, sólo de alcance europeo, reduce el impacto ambiental respecto a otros aeródromos. Además, otro de los factores favorables con que cuenta el de Huelva es la posibilidad de implementar desde su concepción los últimos avances en cuanto a ahorro energético y uso de combustibles alternativos a los de fuentes fósiles. La incorporación de un centro de investigación y desarrollo de hidrógeno verde para su aplicación en el transporte aéreo es otra apuesta de la sociedad privada para hacer del Cristóbal Colón “el aeropuerto más sostenible desde su construcción”.