La nueva Selectividad en Huelva a partir del 2025: todos los cambios en la Prueba de Acceso a la Universidad

Huelva/La Prueba de Acceso a la Universidad a la que se sometarán los estudiantes a partir del próximo 2025 cuenta ya con un real decreto que la regula, publicado hace un mes, tras la reforma educativa impulsada por el Gobierno de Pedro Sánchez. El nuevo modelo cuenta con una estructura, unas características básicas y unos criterios de corrección mínimos comunes para todo el territorio. Conforme a la Lomloe, el Estado las denominará PAU, aunque cada comunidad le dará el nombre que considere oportuno. Se trata de un acrónimo que equivale a Pruebas de Acceso a la Universidad, el cual ya fue empleado a principios de este siglo, con el Gobierno de Zapatero.

En la nueva Selectividad, el aprendizaje memorístico da paso al aprendizaje por competencias, como principal cambio en las pruebas. Se persigue, de este modo, potenciar la capacidad crítica, reflexiva y de pensamiento del estudiante. Fruto de esta propuesta, las preguntas tipo test tendrán mucho menor peso en los ejercicios. No deberán superar nunca el 30% del contenido. En cambio, ganarán importancia las que permiten contestaciones más largas, que invitan a la reflexión y análisis por parte de los estudiantes.

Habrá menos opciones. Aquí radica otro de los principales cambios. Desde la pandemia, el estudiante contaba, como mínimo, con dos opciones en los ejercicios, lo que facilitaba que se presentara a los exámenes sin tener estudiado todo el temario. Ahora tal posibilidad mengua. Habrá un solo examen con varias preguntas a elegir por el alumno.

La ortografía será muy importante. La estructura gramática, la riqueza léxica y una correcta ortografía supondrán hasta un 10% en estos exámenes. Además, las troncales son otras de las grandes novedades. Hasta 2023, al examen de Lengua y Literatura Castellana le seguía el de Historia de España. Aquí al estudiante se le ofrece ahora como alternativa Historia de la Filosofía, que vuelve a ocupar su puesto en las asignaturas obligatorias (recuperación de la Lomloe) tras años entre las optativas. La tercera materia troncal es Lengua Extranjera y la cuarta, la asignatura obligatoria dentro de la especialidad del Bachillerato que se haya estudiado. Todas conforman la fase de acceso, imprescindible de realizar para entrar en la universidad.

Igualmente, en la fase de admisión de la Selectividad, los alumnos que así lo deseen podrán examinarse de una, dos o tres asignaturas para subir nota, en función de la carrera deseada, interés que vendrá condicionado por la nota de corte (servirá de orientación la registrada cursos anteriores). Podrán afrontarse hasta cuatro ejercicios si el estudiante elige un segundo idioma extranjero. Hasta ahora había un mínimo fijado para esta fase, que eran dos. En este 2024, y fruto también de la aplicación de la Lomloe, se ha ampliado ya a 39 el número de asignaturas que pueden ser objeto de examen en estas pruebas.

En cuanto a las alegaciones, en caso de que un alumno no esté de acuerdo con la nota de la Selectividad, podrá reclamarla. Si en la revisión hay una diferencia de dos o más puntos, se solicitará una tercera corrección, de la que se encargará un tribunal constituido por dos docentes. El resultado de esta última fijará la calificación defitiniva.

Con las calificaciones no habrá ningún cambio. La nota de la prueba se calculará haciendo la media aritmética de cada uno de los ejercicios. Será un valor entre 0 y 10 puntos con tres cifras decimales y la nota mínima es un 4. La nota de acceso a la universidad se calcula sumando el 60% de la nota media normalizada de Bachillerato y el 40% de la calificación de la prueba de acceso. También tendrá un valor de 0 a 10 con tres decimales y la mínima necesaria será un 5. 

"Un paso muy importante dentro del modelo de igualdad"— Carlos Soriano - Delegado de Desarrollo Educativo y Formación Profesional y de Universidad, Investigación e Innovación en Huelva

Para el delegado de Desarrollo Educativo y Formación Profesional y de Universidad de la Junta en Huelva, Carlos Soriano, este acuerdo "es un paso muy importante dentro del modelo de igualdad para más del 70% de los estudiantes de este país, y los 1,8 millones de estudiantes andaluces, todos los que potencialmente pueden presentarse a las pruebas de acceso a la Universidad cuando les toque. Son 50.000 cada año, la cifra más alta de toda España".

Dice Soriano que la nueva Selectividad "responde al sentido común, ya que, si en España tenemos un Distrito Único universitario, el acceso no se puede llevar a cabo a través de 17 pruebas distintas en cada comunidad".

Por eso, asegura, es "imprescindible" fijar criterios comunes de evaluación, de corrección, de puntuación ortográfica, que las pruebas se hagan en las mismas fechas, incluso los exámenes en el mismo orden y que se publiquen las notas el mismo día, "para garantizar que todos los alumnos tengan las mismas oportunidades a la hora de optar a una plaza en cualquier universidad".

En cuanto a las fechas de convocatoria, Carlos Soriano quiere recordar que "Andalucía ya ha dado un paso este año", adelantando las fechas para hacerla coincidir con la mayoría de CCAA. De esta forma, "se garantiza que los alumnos tengan las mismas oportunidades a la hora de matricularse", con un período de prescripción semejante en las distintas CCAA.

La UHU valora que las pruebas mantengan la duración de 90 minutos

Desde la Conferencia de Rectores y Rectoras de las Universidades Españolas, cuya responsable de Asuntos Estudiantiles es la rectora de la Universidad de Huelva, María Antonia Peña, han valorado que se hayan aceptado las alegaciones presentadas por la asociación, entre ellas, que "la duración de la prueba sea de 90 minutos", en lugar de los 105 que se habían planteado y que alargarían los ejercicios durante cuatro o más días.

Respecto de las características básicas de los ejercicios de los que consta la prueba, han calificado de "positivo que se evalúe por competencias". Aunque en este caso, se ha matizado que el Ministerio competente debería establecer cuanto antes las directrices que permitan desarrollar el nuevo formato competencial.