Las obras de la calle Béjar y avenida de Portugal estarán en septiembre

En otoño los vecinos de la capital disfrutarán de dos nuevas calles peatonales

La Avenida de Portugal, ayer durante los trabajos de peatonalización.
La Avenida de Portugal, ayer durante los trabajos de peatonalización.
S.h. / Huelva

21 de agosto 2011 - 01:00

El Ayuntamiento de Huelva prevé que las obras de peatonalización de la Avenida de Portugal y la calle Béjar, dado su avanzado estado, estén completamente terminadas en septiembre, para comenzar la nueva temporada de otoño con un nuevo tramo ganado para el peatón en pleno centro de Huelva.

El objetivo final es la peatonalización de la Avenida de Portugal, ampliada hasta la calle Gravina, por el primer tramo de la calle Béjar, para convertir la zona en una nueva puerta de entrada al Centro Comercial Abierto, al unirse con la calle Marina, recientemente peatonalizada, según explicó ayer el Ayuntamiento en un comunicado.

Finalizada la actuación en el primer tramo de la Avenida de Portugal y en la calle Béjar, actualmente se trabaja en el segundo tramo de la Avenida para unirla con la Avenida de Alemania, frente a la tienda de Adolfo Domínguez. Se trata de un proyecto complicado porque además de la peatonalización, incluye la renovación de las redes de aguas e infraestructuras, que han tenido una especial importancia en la calle Béjar, porque en los últimos años los edificios de la zona han sufrido problemas relacionados con las conexiones, derivando en malos olores y humedades.

En total, la actuación supone peatonalizar casi 3.000 metros cuadrados más. Se trata de una zona con gran tradición e historia, no sólo a nivel de la capital sino también de la provincia, ya que durante muchos años albergó la antigua Estación de Autobuses de Damas que constituía, sin duda, uno de los principales canales de acceso a la capital.

El traslado de la vieja estación al nuevo edificio construido en la cercana Avenida Doctor Rubio, restó protagonismo a esta calle que, sin embargo, ha sabido recuperarse, manteniendo su condición de recibidor para los viajeros y antesala del centro de la ciudad.

Las obras, que suponen una inversión de 600.000 euros, además de la renovación completa de la solería, para darle un tratamiento de uso peatonal, con acceso restringido a vehículos, incluye la sustitución completa de las redes de abastecimiento y saneamiento de aguas, así como la modernización de infraestructuras básicas de gas, electricidad y telecomunicaciones.

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