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Huelva/La imagen del contenedor en llamas deja de ser un hecho aislado y se convierte en un episodio habitual cada semana en Huelva, que sufre una oleada de actos vandálicos contra contenedores de diferentes puntos de la capital onubense. Son ya una veintena los contenedores quemados en lo que va de año, según apuntan desde el Ayuntamiento de la ciudad a este diario. O lo que es lo mismo, dos contenedores que se pierden cada semana.
La quema de estos depósitos de basura puede desencadenar incidentes de gran peligro para el ciudadano y para los vehículos y elementos que ubiquen junto al mismo. El fuego puede propagarse fácilmente y, por ende, arrasar otros materiales que se encuentren en la zona, de ahí que desde el Consistorio se haga un llamamiento a la conciencia ciudadana sobre estos actos vandálicos. Asimismo, el vandalismo supone un ataque contra la imagen de la ciudad, que queda desfigurada por las llamas.
Los ataques contra estos depósitos afectan también al bolsillo de los onubenses, pues reponer cada uno de ellos cuesta 1.200 euros al Ayuntamiento. Es por ello que, solo en este año, se han tenido que destinar unos 24.000 euros a la sustitución de los contenedores calcinados como consecuencia de la inhumanidad de aquellos que atacan la ciudad.
Cuando se producen episodios como estos, se abren investigaciones para detener a los infractores y, de hecho, recientemente dos personas han sido detenidas por la quema de contenedores. No son grupos organizados, sino personas que, por cuenta propia, golpean el mobiliario de la ciudad.
El último ataque conocido tuvo lugar a primera hora de este pasado domingo, cuando un incendio provocaba en un contenedor provocaba la alarma de los vecinos sobre las 7:20. Apenas había amanecido y ya el Servicio de Emergencias 112 Andalucía había recibido varias llamadas de alerta en las que se denunciaba fuego y una gran cantidad de humo negro por la zona. Por suerte, no hubo que lamentar heridos
Un equipo del cuerpo municipal de Bomberos se desplazó hasta el lugar, en la calle Isidro Pinedo esquina con calle Córdoba, apagando rápidamente el fuego que dejó una gran columna de humo. Minutos después de su llegada, sobre las 8:00, los efectivos regresaron al parque municipal tras dar por extinguido el fuego.
En los últimos días de febrero se produjeron también dos episodios similares con solo dos días de diferencia entre uno y otro. Un contenedor quedaba oculto por las llamas en la noche del 20 de febrero en la calle Roque Barcia, teniendo que intervenir los bomberos de urgencia. Aquel día, las llamas cobraron gran altura por unos cartones depositados junto al contenedor de basura orgánica, y afectaron también a un depósito de reciclaje de vidrio que se encontraba al lado. Con suma rapidez, una dotación de bomberos acudió ante la alarma de los vecinos por el incendio que, pese a no ser cercano a ninguna vivienda ni vehículo, alertó a la comunidad vecinal por la altura que alcanzaron las llamas.
Dos días más tarde, el 22 de febrero, otro contenedor salía ardiendo en la calle Pablo Rada de Huelva capital, a la altura de la Plaza de la Soledad, generando una gran alarma entre los vecinos y los que pasaban por la zona. Nuevamente, la rápida actuación de los bomberos evitó daños mayores.
Estos daños gratuitos a la ciudad suponen un riesgo para las personas y otros bienes como los vehículos aparcados junto a estos contenedores, además del perjuicio para las arcas municipales y el bolsillo de los onubenses, por lo que se pide conciencia y colaboración ciudadano con ánimo de que estos episodios no se repitan.
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