Un paciente con varias patologías denuncia haber esperado "un día entero" para ser ingresado en el hospital Juan Ramón Jiménez

Un día entero es el tiempo que una familia denuncia que esperó para el ingreso de un paciente en el hospital Juan Ramón Jiménez. José Jesús Blas -51 años-, que padece la enfermedad endémica de Andrade, está trasplantado, tiene amputada su pierna izquierda y es diabético, llegó a las 11:00 del pasado lunes 20 al centro hospitalario por un problema de celulitis en la pierna derecha y no fue "hasta las 10:00 del día siguiente cuando entró en una habitación", asegura su mujer a este periódico.

Su esposa explica que, al momento de entrar en Urgencias, "le hicieron analíticas para ver la infección que presentaba mi marido" que, "no olvidemos, es un paciente de alto riesgo". Tras ello, le tocaba aguardar en sala de espera "sin recibir ninguna noticia hasta, aproximadamente, la medianoche, cuando le dice que tiene que ingresar". Sin embargo, "nos dicen en el hospital que no hay ni sillones ni camas de hospitalización disponibles, por lo que teníamos que permanecer en la sala de espera".

Para José Jesús y su mujer Cori la noche se convirtió en una "pesadilla", relatan. "Tuve que tumbar a mi marido en las sillas porque no aguantaba ni en la silla de ruedas", sostiene, al tiempo que recuerda que "a las 3:00 me ofrecieron una camilla para al menos tumbarse"; y "no fue hasta las 4:00 cuando conseguimos estar en una esquinita en Mínimos".

El paciente amanecía el martes 21 en la misma situación "y fue a las 10:00 cuando pudo entrar en una habitación en la que ahora está hospitalizado". Cori, su mujer, tilda la situación que dicen haber sufrido de "indignante" por la "angustia que daba verlo ahí tirado con 39 de fiebre y con todas las patologías que tiene". A su vez, quiere hacer mención del "clima de crispación que se vivía esa noche en la sala de espera, donde nos encontrábamos ocho familias enfadadas por lo que estaba pasando". "Yo no sabía qué más hacer para conseguir una cama", lamenta, al tiempo que agradece "la buena disposición de los sanitarios, que no tenían nada que ver".

La familia del paciente emite también una queja por el alta hospitalaria que recibió el miércoles previo al último ingreso y achacan la decisión "a la falta de camas para destinadas a aplacar el pico de gripe, según nos dijeron".

Desde el centro hospitalario, preguntado por este diario, se recuerda que en estos momentos está activado el Plan de Alta frecuentación, "como corresponde a esta época del año en la que se produce un alza en la demanda asistencial de manera progresiva como consecuencia de la llegada de la gripe". Explican que activan medidas que se adaptan a la presión asistencial prevista, que hacen que "el centro y los profesionales estén preparados para atender el incremento de demanda que suele darse en esta época del año". "Aun así, no se puede conocer con exactitud en qué día exacto se va a producir un incremento exponencial del número de pacientes en Urgencias, pues depende de múltiples factores", por lo que "se dan días o tramos de horas en un mismo día en los que se concentran un elevado número de pacientes al mismo tiempo".

Concretamente, los días 20 y 21 de este mes fueron los días en los que hubo un pico más alto de pacientes que acudieron a Urgencias y que precisaban ingreso, "cumpliéndose los protocolos y atendiéndose con celeridad en relación al nivel de urgencia que presentaba el paciente". Así, prosigue, "es importante destacar la especial implicación de los profesionales, responsables de los servicios clínicos, atención a la ciudadanía, servicios de apoyo y directivos del hospital en este período de Alta Frecuentación, con la finalidad de responder con agilidad a la mayor demanda de estas fechas".

En este sentido, la Comisión Operativa de Seguimiento de Alta Frecuentación se encuentra "vigilante y planifica la asistencia que sea necesaria en cada momento, coordinando y agilizando las pruebas diagnósticas, realizando una gestión de camas más eficiente y fluida para facilitar los ingresos, potenciando consultas rápidas desde urgencias, entre otras medidas que conllevan una agilización de los circuitos". Asimismo, concluyen, "diariamente se monitoriza, tres veces al día, la afluencia de pacientes al centro, con la finalidad de proporcionar esta información al grupo de seguimiento del Plan de Alta Frecuentación del SAS".