Psicología y Salud: Lo que entendemos como autosabotaje
Todo está en tí
El miedo, la inseguridad y las creencias limitantes pueden impedirnos alcanzar nuestros objetivos
Psicología y Salud: La queja, un desgaste mental y emocional
Cuando dejamos cosas a medias, rechazamos oportunidades porque creemos que no es nuestro momento, o nos entretenemos en todos los detalles sin avanzar, es posible que nos estemos autoboicoteando.
El autosabotaje es un gran impedimento para cumplir nuestros sueños. Es un comportamiento que nos afecta en todos los aspectos de nuestra vida: en nuestro trabajo, en nuestras relaciones y, a veces, incluso en nuestra salud. Podría definirse como el acto de fracasar intencionadamente en nuestro propio éxito.
Entre los comportamientos de autosabotaje más comunes se encuentran procrastinar o criticarse a uno mismo. También se puede manifestar de manera repetitiva, como al repetir los mismos errores una y otra vez, posponer tareas continuamente, e incluso, a veces, enfermarse para evitar alcanzar lo que buscamos. El autosabotaje no es una forma de librarse de las responsabilidades; es una manera de impedir que la persona logre sus objetivos mediante acciones, pensamientos o creencias que limitan su avance tanto profesional como personal.
Este fenómeno psicológico complejo suele deberse a inseguridad, miedo y tendencias autodestructivas que pueden generarse por diferentes motivos:
- Miedo al fracaso: el solo hecho de temer no poder alcanzar esas metas hace que ni siquiera lo intentemos, saboteando cualquier esfuerzo.
- Autocrítica: los pensamientos autocríticos, generalmente consecuencia de una baja autoestima, nos hacen creer que "no somos suficientes". Esto impide intentarlo, pues no nos sentimos capaces ni dignos de éxito, felicidad o realización.
- Perfeccionismo: cuando no logramos cumplir con los altos estándares que nos imponemos, nos sentimos incompetentes o inadecuados, y comenzamos a sabotear nuestro propio éxito. Este perfeccionismo también puede incluir hábitos de personas autodestructivas, como relaciones tóxicas y prácticas de vida perjudiciales, rechazando así oportunidades valiosas.
- Creencias limitantes: la autoinculpación nos hace sentir responsables de situaciones que no dependen de nosotros y que están fuera de nuestro control. Este sentimiento de culpa reduce nuestras posibilidades de avance.
- Experiencias traumáticas: pueden dejarnos heridas emocionales que generan pensamientos como "no soy aceptado" o "no soy querido", provocando así nuestro propio autoboicot.
- Desaprovechar oportunidades: por miedo e inseguridades, muchos evitan involucrarse en actividades que podrían ser beneficiosas.
- Poner excusas: la justificación constante nos quita responsabilidad y evita que enfrentemos desafíos. Las excusas funcionan como un mecanismo de defensa contra el posible fracaso o la crítica, pero a la vez nos impiden alcanzar nuestras metas.
Muchas personas, al prever que podrían no conseguir la meta que desean, deciden abandonar antes de tiempo, lo que nace de la frustración y la falta de confianza. Otra manifestación evidente del autosabotaje es negar las propias necesidades o deseos, diciéndose "no lo necesito", "me da igual" o "estoy bien". Todos estos comentarios son típicos de alguien que se autosabotea.
A nivel emocional, el autosabotaje afecta las relaciones interpersonales, manifestándose en actitudes de rechazo, indiferencia y descuido en los vínculos.
Entre los síntomas más comunes del autosabotaje se encuentran la falta de motivación, la tendencia a establecer relaciones tóxicas e inseguras, la inseguridad, plantearse objetivos inalcanzables, experimentar agotamiento crónico, mantener un pensamiento autodestructivo, y abandonar metas u objetivos.
Para eliminar el autosabotaje, algunos comportamientos útiles son:
- Pensar menos y actuar más: tomar acción y elaborar un plan para avanzar paso a paso alivia la presión.
- Autocuidado: atender nuestras necesidades físicas, emocionales y mentales, como comer saludablemente, hacer ejercicio, tomarse un descanso y practicar la autocompasión.
- Cuestionar las creencias limitantes: evaluar si esas ideas negativas realmente son ciertas o si son pensamientos antiguos que hemos aceptado sin cuestionar.
- Tomar pequeños pasos: hacer cosas poco a poco para ganar confianza y sentirnos mejor.
Tanto las causas y síntomas del autosabotaje, como las estrategias para superarlo, pueden trabajarse más eficazmente con la ayuda de un profesional. Esto facilita el camino hacia la autocompasión y la sanación, haciendo el proceso más llevadero y efectivo.
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