Sofía Allepuz, la niña de Huelva que está detrás de la protagonista de 'Rita': "Paz Vega se fijó en ella en cuanto la vio"

Huelva/Mitad de Huelva y mitad de Almería, una profesional de pies a cabeza -a pesar de su aún corta edad- y con una sólida vocación para la interpretación. Sofía Allepuz, protagonista de la película dirigida por Paz Vega que se estrena por primera vez en calidad de directora, ha debutado como actriz a sus solo ocho años, aunque con apenas cinco comenzaba con una carrera profesional en la que "cada trabajo ha sido importante".

Según contaba Paz Vega y transmiten sus padres a este periódico, Sofía fue la primera niña a la que vio en el largo proceso de casting para Rita. Le llamó la atención, pero pensó que era muy pequeña, en lo que a edad y también a tamaño se refiere. "Cuando comenzaron las pruebas, le dio miedo que no aguantara el rodaje, pero no encontraban el perfil que buscaban. Tras ver a muchas niñas y no decidirse, Paz decidió volver a ver a Sofía. Y así se convirtió en la actriz que da vida a Rita".

Comenzaba en el mundo de la interpretación a raíz de observar a su hermano Hugo, que ahora tiene 14 años, hacer sus primeros pinitos también como actor de teatro musical y cortos. "Viéndolo a él pensó que quería hacer lo mismo", cuenta su madre, la onubense Carmen Allepuz y su padre, Daniel García, a Huelva Información. "Nosotros nos lo tomamos en sus inicios como una actividad extraescolar. Tenía cinco años y, en cuanto la vieron en clases de interpretación, nos dijeron que Sofía prometía". Se animaba a probar en algunos procesos de selección entonces y, poco después, comenzó a interpretar personajes principales que la han llevado hasta la ópera prima de la actriz sevillana.

Apuntaba maneras desde que era muy pequeña, pero nadie se esperaba que a sus ocho años iba a estar en las pantalla de todos los cines de España y recibiendo una gran acogida del público. "Los profesores y directores con los que se codeaba nos decían que era muy disciplinada, que escuchaba mucho, seguía muy bien las indicaciones para ser tan chica". A partir de uno de sus últimos trabajos, Cuando las cigarras callen, película presentada también en el Festival de Cine de Huelva y rodada en Fuenteheridos, todo fue crecer. "Con Rita, ya la conocían de otros trabajos y nos presentaron el casting. Fue un mes y medio de rodaje y se lo tomaba, gracias a los coach y al equipo, con naturalidad y como un juego".

Sigue siendo una niña, pero "sorprendería la madurez que tiene". Según sus padres, es consciente de que acaba de hacer una película que tiene impacto, aunque mantiene una visión realista de lo que le está sucediendo a su alrededor. "Hacemos hincapié en que es una profesión con altibajos y que es una niña, ha hecho un trabajo y es como otros tantos muy buenos que también ha hecho". Intentan, dicen, "que no se le suba a la cabeza", priorizando siempre su descanso, sus estudios y seguir como "han hecho hasta la fecha": "Es importante que vaya bien en el cole y ella es la que decide si le apetece hacer un siguiente proyecto".

Recuerda disfrutarlo mucho durante la grabación, recibir un enorme cariño y hacer amigos, porque no era la única niña que aparecía en la película. Otros de sus compañeros de reparto eran aquellos que daban vida a su hermano y vecino, también niños. Así, siguiendo las indicaciones de la reconocida directora, parte del elenco que no pasa de los 12 años ha puesto en pie una película que combina la ternura de la infancia con la crudeza de la violencia de género y el convivir con ella de puertas para adentro. Con buena acogida y sucediendo durante uno de los veranos de la infancia de una niña, se desarrolla en escenarios de Sevilla y en algunos de los enclaves de Huelva, como la playa de Mazagón.