Testimonios y experiencias paranormales en el Hospital Juan Ramón Jiménez de Huelva

Huelva/El hospital Juan Ramón Jiménez fue construido para cubrir la necesidad de especialidades médicas que faltaban en la provincia de Huelva. Antes de su apertura, muchas de estas especialidades dependían de los hospitales de la provincia de Sevilla. La inauguración del centro marcó el fin de la actividad del hospital Manuel Lois García, cuyo personal y pacientes fueron trasladados al nuevo hospital, cerrando definitivamente el 28 de diciembre de 1993.

Este hospital introdujo el Servicio de Medicina Nuclear en Huelva en 1994, seguido de la Oncología Radioterapéutica en 1995. En el año 2000, su unidad de Cardiología Hemodinámica realizó los primeros cateterismos cardíacos en la provincia, y en 2002 se llevaron a cabo las primeras resonancias magnéticas. La Unidad de Mama se inauguró en 2007 y la de Cuidados Paliativos en 2012.

Pero en su interior también hay hueco para el misterio…Uno de los testimonios más recientes proviene de una enfermera con experiencia en el centro. “Una noche, durante mi turno, noté que la temperatura de la sala bajó drásticamente. Al principio pensé que era el aire acondicionado, pero los controles estaban apagados. De repente, vi una sombra negra moverse a lo largo del pasillo, justo antes de que una de las camas se desplazara unos centímetros sin que nadie la tocara”, relató María, todavía nerviosa por el incidente.

Este tipo de experiencias no son raras ya que varias personas han asegurado haber visto "sombras" que parecen moverse de manera errática por los pasillos, principalmente en las áreas menos transitadas y durante la noche. Aunque algunos tratan de racionalizar estos encuentros, las historias se multiplican, haciendo difícil ignorarlas.

Un testimonio particularmente impactante proviene de un médico. Relata una noche especialmente tranquila hasta que un monitor cardíaco comenzó a sonar, indicando que el paciente tenía problemas: “Corrimos hacia la habitación, pero cuando llegamos, el paciente estaba estable. Fue extraño, como si el monitor se hubiera activado solo, algo que no tiene explicación técnica. Justo en ese momento, vi una figura borrosa en la puerta. Cuando fui a ver más de cerca, desapareció por completo”.

El personal de mantenimiento también ha sido testigo de lo inexplicable. Uno de ellos, quien ha trabajado en el hospital por más de una década, narra uno de sus encuentros más desconcertantes. "En la parte del sótano vi, perfectamente, una especie de silueta negra que se alejaba de la puerta por la que yo estaba, lo vi perfectamente” comentó todavía impresionado.

Las historias de los pacientes tampoco faltan. Una mujer mayor, ingresada por problemas respiratorios, asegura haber visto a una niña pequeña en su habitación una noche.

Entre los fenómenos más comunes que se reportan en el hospital están las luces que se encienden y apagan solas, las puertas que se cierran sin intervención humana y los inexplicables ruidos de pasos en pasillos vacíos. Sin embargo, quizás lo más perturbador son los "visitantes" que algunos pacientes han visto a su alrededor antes de fallecer. Este tipo de visiones suelen asociarse con presencias de familiares o seres queridos que han muerto, pero en muchos casos, los pacientes describen figuras desconocidas que, al parecer, no pertenecen a este mundo.

Otra enfermera relata un episodio que aún la deja sin dormir por las noches: “Estaba revisando la habitación de un paciente terminal. Cuando entré, él estaba mirando hacia el rincón de la habitación, como si hablara con alguien. Me acerqué para ver si todo estaba bien y me dijo: ‘Ella está aquí para llevarme’. No había nadie más en la habitación. Al día siguiente, el paciente falleció, y me quedé con una sensación escalofriante”.

El origen de estos fenómenos se ha relacionado con la naturaleza misma del hospital, un lugar donde la enfermedad, el dolor y la muerte son parte del día a día.

Sin embargo, no todos en el hospital creen en lo paranormal. Algunos se limitan a atribuir los fenómenos a fallos eléctricos o al desgaste natural del edificio. "Es un edificio viejo, las instalaciones no son perfectas. No hay nada más allá de eso", afirma.

A pesar de los esfuerzos por buscar explicaciones lógicas, lo cierto es que el Hospital ha acumulado, a lo largo de los años, suficientes testimonios como para ganarse su lugar en el imaginario popular como un lugar encantado. Tanto los empleados como los pacientes han experimentado algo que desafía la razón, y aunque las explicaciones varían, el misterio sigue latente.

El hospital, que continúa funcionando, guarda entre sus muros no solo historias médicas, sino también relatos que parecen sacados de una película de terror. Y mientras el personal sigue trabajando con dedicación para cuidar de los enfermos, algunos no pueden evitar mirar de reojo a las sombras que recorren los pasillos en la noche, preguntándose si lo que han visto es fruto de su imaginación o algo mucho más inquietante.

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