El ultimátum de Adif se agota y el bloqueo de 5 hectáreas impide el avance de las obras

En un panorama terminante, las obras que se ejecutan desde julio en Las Metas para la construcción de la infraestructura ferroviaria del AVE se están limitando al remate de los trabajos geotécnicos, en pequeñas islas de suelo disponible que apenas han hecho avanzar la actuación de Adif un 10% en lo que va de año. "Aunque el Ayuntamiento inició el derribo de edificaciones en la zona, en el último mes y medio no hemos tenido acceso a un solo metro cuadrados más", apuntaron ayer en declaraciones a este periódico desde el ente dependiente del Ministerio de Fomento.

Cinco hectáreas -entorno a la mitad del ámbito de la operación- siguen todavía pendientes de puesta a disposición a Adif, ya que a la zona ocupada por las naves y viviendas en vías de demolición, se suman las naves que aún no han sido desalojadas y toda la servidumbre de accesos viarios y servicios afectados por este bloqueo.

Sale de plazo, pues, el ultimatum que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias planteó al Consistorio onubense, con algunos pasos ejecutivos que, con todo, tienen el calendario en contra. El pasado 5 de febrero, el presidente de Adif, Antonio González, visitó Huelva para la constitución del jurado del concurso para el proyecto de la estación del AVE -que la semana pasada se adjudicó al estudio de Rafael de La-Hoz-, haciendo hincapié en que, si a mediados de marzo el Ayuntamiento no liberaba más suelo, se paralizaría por falta de terrenos disponibles un proyecto dotado de una inversión de 53 millones de euros.

Adif confirma ahora que las obras han tocado fondo en este sentido, ya que hasta la fecha, los operarios de la UTE contratada sólo se han podido intervenir en el 48% del ámbito del Plan Especial de Infraestructuras Ferroviarias. Gran parte de la maquinaria se ha retirado de la zona, ante la posibilidad de avanzar, y el dispositivo de obras sigue activo pero únicamente a expensas de trabajos puntuales y residuales. La situación de la próxima semana es una incógnita supeditada al ritmo de los acontecimientos.

Al Consistorio tampoco le salen las cuentas en lo que atañe a sus propios plazos, ya que el pasado 19 de febrero, del que hoy se cumple un mes, el alcalde Pedro Rodríguez (PP) acudió a Las Metas -que en esos momentos se había convertido en el ojo del huracán político, escenario simbólico de la batalla electoral-, anunciando que las demoliciones que empezaban entonces acabarían en un mes, para abordar, en el mes siguiente, el derribo de las naves de las empresas expropiadas, Weickert y Martín Agrícola SA y Construcciones Metálicas Garpe, de la que no constan siquiera planes de desalojo. A día de hoy, la complejidad del desmantelamiento de las cubiertas de fibrocemento (con contenido de amianto, residuo peligroso y cancerígeno) han dilatado en el tiempo las demoliciones.

Respecto a Weickert y Martín, como ayer publicó este diario, la empresa trabaja "a marchas forzadas" para despejar la zona y realizar el traslado a otra nave "lo antes posible", pese a que la compañía aún no ha cobrado la indemnización, cuya resolución está pendiente de decisión judicial. El concesionario de maquinaria agrícola, fundado en 1897, cuenta en la zona de Las Metas con una nave y otras dos comunicadas que suponen un total de 15.000 metros cuadrados y emplea a un total de 20 personas. Por ello, la empresa ha subrayado en declaraciones a la agencia Europa Press "el esfuerzo" que va a realizar la para afrontar el coste del traslado en la actual coyuntura económica.