La Fundación José Caballero quiere cerrar la llegada del legado del pintor
El patronato renueva su composición y se fija como objetivo lograr un acuerdo institucional para exponerse en Huelva
La viuda del artista espera asegurar pronto el futuro de su obra
Huelva/Nuevo intento y, probablemente, última oportunidad para que el legado del pintor José Caballero llegue y se quede en Huelva. Tras doce años de existencia sin conseguir los frutos deseados, ahora la Fundación Caballero-Thomas de Carranza acaba de renovar su patronato con el claro objetivo de cerrar un acuerdo institucional por el que la obra del onubense se quede definitivamente en Huelva, en un centro dedicado a su figura, como uno de los grandes vanguardistas españoles del siglo XX que es.
Este mes se ha cerrado en Madrid la nueva composición del órgano rector de la fundación, en la que se mantiene la viuda del pintor, María Fernanda Thomas de Carranza, como presidenta, con tres patronos ahora, entre los que se encuentra, como vínculo con la sociedad onubense, el conocido gestor cultural José Luis Ruiz, además de dos sobrinos del pintor, Roberto Tojo y Silvia Segarra, con Raúl Estévez como secretario.
A Ruiz le ha sido encomendada la labor de mediar con las instituciones onubenses para que se cierre a la mayor brevedad posible un acuerdo que lleve todo su legado desde Madrid hasta Huelva, como ciudad natal de Caballero.
Este patrimonio, que en la actualidad está siendo inventariado en su totalidad, está compuesto por pinturas, dibujos a lápiz y tinta, grabados, bocetos, trabajos para escenografía que incluyen telones, alfombras y vestuario, además de fotografías y cartas que reflejan la relación de amistad que mantuvo con grandes artistas, como Federico García Lorca, Pablo Neruda, Rafael Alberti, Luis Buñuel y Miguel Hernández, entre otros. A estos se une su propia colección de arte, con obras firmadas por Picasso y Chillida, a quienes también conoció.
José Luis Ruiz asegura a Huelva Información que es deseo de la viuda, María Fernanda Thomas de Carranza, que quede atado cuanto antes el futuro de la obra del artista onubense, que pasaría por establecerse en su ciudad natal. "El anhelo de la Fundación es que el Ayuntamiento de Huelva lidere un acuerdo institucional público-privado del que formen parte el Ministerio de Cultura, la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y la Diputación de Huelva, además de empresas de primer nivel nacional e internacional que se integren en el Patronato de la Fundación y estén a la altura de la extraordinaria dimensión que tiene la obra de José Caballero en la historia del arte español del siglo XX".
El primer paso sería lograr ese compromiso, que a María Fernanda Thomas de Carranza le gustaría dejar cerrado en vida para que se asegure la integridad y continuidad del legado. El segundo hito, y directamente relacionado, sería la apertura de un centro expositivo permanente y exclusivo en la capital onubense, que garantice el fin principal de difundir y divulgar su figura y su obra.
"Hay alrededor de 2.000 objetos que forman parte de ese vasto legado que debería exponerse en un museo que sea muy dinámico, con muestras permanentes y temporales tematizadas. Para ello hay edificios sin uso en la ciudad, que podrían salvar la dificultad añadida de construir uno nuevo, aunque es cuestión de reunirnos y ver las opciones que hay", explica Ruiz.
Desde la Fundación Caballero-Thomas de Carranza se ha valorado la buena disposición del Ayuntamiento de Huelva tras la donación en 2015 de casi 200 dibujos y un óleo relacionados con los recuerdos onubenses del pintor, recopilados en Cuadernos de Huelva. Entonces desde el equipo de gobierno de Gabriel Cruz se hizo un esfuerzo en una gran exposición en tres salas de la Casa Colón, Caballero dibuja, Huelva colorea, a la altura del esperado acontecimiento, con patrocinio incluido de la compañía Cepsa.
Tras ese gesto de generosidad con Huelva por parte de la viuda del artista, se espera que la unión de todas las instituciones pueda corresponder ahora el primer paso dado y continuar con las conversaciones para que el resto del legado que dejó José Caballero llegue y se quede definitivamente en la ciudad que le vio nacer.
Atrás queda el frustrado intento de establecer la Fundación en Alcalá de Henares, ciudad madrileña donde residió el pintor onubense, y donde fue enterrado en 1991, aunque nunca olvidó Huelva y es aquí donde su viuda quiere que permanezca su recuerdo.
El reconocimiento que le falta en su ciudad natal
Fue el alcalde José Antonio Martín Rite quien le concedió la medalla de oro de la ciudad en abril de 1986, y justo treinta años después, otro regidor, Gabriel Cruz, le entregó a su viuda, a título póstumo, la distinción de hijo predilecto de Huelva. Entre medio, la Corporación que presidía Juan Ceada le concedió en 1989 una calle en la capital, al mismo tiempo que era nombrado hijo predilecto de Andalucía. Y más tarde, en 2001, con Pedro Rodríguez como regidor, el Ayuntamiento descubrió una placa en el lugar que ocupaba la casa donde nació. El Salón de Plenos de la Diputación sigue presidido por el gran mural que pintó y hasta un centro de enseñanza lleva su nombre en la capital. Ahora, aseguran desde la Fundación, sólo falta el último paso para su reconocimiento definitivo: la unión de instituciones para propiciar que toda la obra de José Caballero se quede en Huelva.