Homenaje a Gonzalo Clavero en la Peña Flamenca de Huelva

En la noche del pasado viernes, y dentro de la programación de los viernes peñeros, en los locales de la Peña Flamenca de Huelva se celebro la clausura del XII Circuito Flamenco por las peñas flamencas federadas, en esta ocasión homenajeándose al flamencólogo calañés Gonzalo Clavero Vázquez. La organización del acto corrió a cargo de la Federación Onubense de Peñas Flamencas El Fandango y contó con el patrocinio del Instituto Andaluz del Flamenco de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía.

El presidente de la peña anfitriona, Eduardo Hernández Garrocho, dio la bienvenida al numeroso público que llenaba por completo los salones, familiares y amigos, cantaores y aficionados de varias peñas, autoridades, e invitó a subir al presidente federal, Manuel López Martín, para que presentara el acto, no sin antes dar a conocer la concesión del galardón La Uva Flamenca, de Canal Sur, a nuestra entidad. Presentía Eduardo que la noche iba a ser muy flamenca y emotiva, por la calidad de los artistas en cante y en baile, y por la emotividad del reconocimiento al homenajeado, Gonzalo Clavero.

Manuel López hizo entrega a Eduardo H. Garrocho de un cuadro del homenajeado como es costumbre de entregar a todas las peñas federadas. Acto seguido hace su aparición Gonzalo Clavero, de quien el presidente de la Federación haría una breve exposición de su vida personal y artística, afirmando que es un auténtico flamencólogo, habiéndolo demostrado siempre, por su contribución al estudio del fandango, por la creación de letras y músicas que, gracias a él, se escuchan, y por su buena disposición para colaborar en cuantos actos flamencos se le ha requerido.

También resaltó la labor didáctica y pedagógica con su academia de cante y toque en su pueblo, de la que momentos después dieron buena muestra algunos jóvenes alumnos. La programación se haría en dos partes: la primera, con cantes y la entrega al homenajeado de un presente y, la segunda, para el baile de María José Jerónimo y su grupo.

Con cantes de Levante, tarantas, murcianas, cartageneras y cantes de madruga se despachó bien el amigo Gonzalo, para culminar con una serie de fandangos, de Alosno primero y de su pueblo después. Existía gran expectación por escucharle estos palos flamencos que domina como nadie, y no defraudó en absoluto, ya que los que lo hemos visto en varias actuaciones, sabemos lo que da de sí. Saludaría a Manolo Limón, presente en la sala y contaría una anécdota con el mítico guitarrero alosnero Sebastián Perolino. Terminó con martinete y seguiriyas, la de Diego El Marrurro, El Fillo, Joaquín El de la Chana y la toná del Cristo de Luis de la Juliana. El tocaor era Manolo Rodríguez, del que ya conocemos su adaptabilidad hacia los cantaores y su virtuosismo con la sonanta. No en vano Manolo es profesor de varias academias de toque de peñas flamencas. Muchos fueron los aplausos que oyó tras sus seguidas intervenciones, siendo despedido por el público emocionado y en pie, por el recital de buen cante que nos obsequió el amigo Gonzalo Clavero.

Continuaría la primera parte con dos jóvenes alumnos calañeses, Francisco Jiménez y Manuel Jesús Sánchez, que dejaron bien alto el pabellón del maestro Gonzalo. El primero empezaría por dos malagueñas, de la Trini y de la Peñaranda, muy bien ejecutadas, para pasar a soleá de Triana y acabar por fandangos naturales, del Pichichi y El Carbonerillo. Fue muy aplaudido por los aficionados, siguiéndole Manuel Jesús por tarantos, rondeñas y fandangos valientes de Alosno, Juan María, El Cañita y Macande, siendo premiado con su antecesor con grandes aplausos.

En el descanso saludamos a muchos aficionados calañeses que se habían reunido para la ocasión, como el diputado del Andévalo José Luis Barragán y su esposa, Beatriz Martín Ovando; Juan Camacho, arquitecto municipal de El Almendro; Manuel Martín Ovando, el presidente de la Peña de Calañas, Rodrigo Delcán, y su secretario, Manuel Tejada; el presidente de la peña de Punta Umbría, Carmelo Macías, Patrocinio González, Manuel Pérez Rivera, Manolo Batista, Andrés S. Buenaposada, Bernardo Romero y muchos más que sería interminable de contar.

Empieza la segunda parte con el baile de la onubense María José Jerónimo. De inicio, Alfonso Carlos Corbi cantaría por soleá y por bamberas -con esa voz tan especial para acompañar el baile-, para dar entrada a la bailaora que con una majestuosidad y empaque hizo vibrar a un público expectante y silencioso, que prorrumpía con olés sus pasos. Se cambiaría de atuendo para bailar con gracia y mucha alegría por tientos tangos y cantiñas. Mª José Jerónimo va subiendo peldaños día a día con su ejecución ortodoxa en el baile y prueba de ello es el incremento de alumnas en sus distintas academias, entre ellas la de la peña de Punta Umbría.

Con buen sabor de boca por la rica noche flamenca, los muy numerosos aficionados flamencos se despiden hasta la próxima cita, el viernes 21, con una actuación de Navidad de la academia de cante y guitarra de la P.F.H.