Buena aproximación al universo licántropo

Hombre lobo | Crítica

Julia Garner y Matilda Firth huyen del hombre lobo.
Julia Garner y Matilda Firth huyen del hombre lobo.

La ficha

**** 'Hombre lobo'. Terror, EE UU, 2025, 103 min. Dirección: Leigh Whannell. Guion: Leigh Whannell, Corbett Tuck, Rebecca Angelo, Lauren Schuker Blum. Música: Benjamin Wallfisch. Fotografía: Stefan Duscio. Intérpretes: Christopher Abbott, Julia Garner, Matilda Firth, Sam Jaeger.

La más hermosa y poética aproximación al hombre lobo que el cine haya hecho fue el episodio Male di luna de aquella gran película de los hermanos Taviani que es Kaos (1984), basada en relatos breves de Pirandello. Pese a ser una de las criaturas con más antiguos orígenes en muchas culturas, el licántropo no ha tenido fortuna en el cine. Desde los pioneros hombres lobo de la Universal –El hombre lobo de Londres (1935) y El hombre lobo (1940)- a la reciente serie Underworld (2003-2017), pasando por nuestro Paul Naschy o las deliciosas extravagancias mejicanas tipo Santo y Blue Demon contra Drácula y el hombre lobo, sin olvidar las bromas de Yo fui un hombre lobo adolescente, interpretada en 1957 por Michael Landon antes de convertirse en el Little Joe Cartwright de Bonanza, Un hombre lobo americano en Londres (1981) de Landis o Teen Wolf: de pelo en pecho (1985) de Rod Daniel. Quizás solo Aullidos (1981) de Joe Dante, sobre todo Wolf (1994) de Mike Nichols y, en menor medida, El hombre lobo (2010) de Joe Johnston han hecho aportaciones que vayan más allá -con la excepción de la bella recreación de los Taviani ya citada- de los entrañables seres peludos con dentaduras postizas generalmente confinados en la serie B y más abajo.

Esta nueva aproximación al licántropo se sitúa en una línea media-alta entre las mejores películas a él dedicadas. La dirige Leigh Whannell, el guionista de James Wan –Saw, Dead Silence, Insidious, Insidious 2- que se pasó a la dirección en 2015 con la tercera entrega de las dos últimas, a las que siguieron la mediana Upgrade en 2018 y la interesante revisión de la novela de H. G. Wells y de la película de la Universal El hombre invisible en 2020. En esta línea de reinterpretar un tema clásico de la fantasía o el terror de aquella gran factoría del terror -y afortunadamente alejándose del universo Saw- aborda el tema del hombre lobo con originalidad, dándole carga dramática al desdoblamiento de personalidad que convierte al licántropo en un ser dolorosamente consciente de su doble personalidad (un poco a lo Jeckyll y Hyde), acierta al abordar el tema más clásico del licántropo de atacar a quienes ama y al concentrar la acción.

No carece de algunos desfallecimientos, pero puede la originalidad de la propuesta humanizadora (en la estela del hombre lobo de Mike Nichols que interpretó Jack Nicholson), el intento de dar cierta complejidad dramática a la relación entre los personajes, los apuntes que aproximan el tema a los cuentos infantiles de miedo, la ausencia de efectos especiales peludos, las muy buenas interpretaciones de Christopher Abbott, Julia Garner y la pequeña Matilda Firth, y la excelente banda sonora de Benjamin Wallfisch, que tiene el mérito de crear atmósferas de tensión y terror con sutileza, sin recurrir a efectismos pero con fuerza cuando la acción lo requiere, y de aportar una dimensión emocional que ayuda a los intentos de dar un tono más humano a la película. Buen camino ha escogido Leigh Whannell en su revisión de los clásicos de la Universal.

stats