Juegos de palabras

GIRABA el Surcos Nuevos de la semana pasada alrededor de juegos de escondite, discurriendo desde el tradicional que los pequeños aprenden una generación tras otra, quizá desde hace milenios, hasta el sofisticado Pokémon GO, para terminar proponiendo la búsqueda de palabras compuestas con lexemas de significados en oposición, como agridulce, blanquinegro, vaivén o lubricán. Algunos amables lectores han aportado nuevos ejemplos: altibajo, subibaja, claroscuro, duermevela. La tauromaquia recoge el término metisaca. En la mitología griega encontramos al hijo de Hermes y Afrodita, Hermafrodito, del que la ninfa Salmacis se enamoró hasta el punto de pedir a los dioses que sus cuerpos fusionados no se separaran nunca, lo que dio lugar a un nuevo ser provisto de los dos sexos. Desde ahí el sentido de la palabra hermafrodita (bisexual) se ha extendido hasta la Botánica para designar a las plantas monoicas y a las flores que poseen estambres y pistilos. Andrógino se incluye en la misma familia en su doble sentido de intersexual o de persona que ofrece una imagen ambigua presentando rasgos que corresponden al sexo distinto al propio. Finalmente marimacho se dice, coloquial y despectivamente, de las mujeres que asumen un rol de género que tradicionalmente se ha asignado al género masculino. La palabra no me gusta, pero ahí está, entre las compuestas por lexemas opuestos que figuran en el DRAE.

Para terminar agosto enredando con palabras, voy a proponer otro juego parecido, quizá más sencillo. Siguiendo con las palabras compuestas, se trataría ahora de aquellas que están formadas, no por la unión de dos, sino de tres o más términos. Nacen de frases que se hicieron populares hasta el punto de ser admitidas por la Real Academia después de que las palabras que las componían se juntaran hasta formar una sola. Algunas son muy curiosas y vale la pena conocerlas desde su origen. Por ejemplo, vivalavirgen, que hoy se aplica a la persona despreocupada o informal; o correveidile, que señala de forma tan expresiva al que trae y lleva cuentos y chismes, o directamente, al alcahuete o la celestina.

Anagramas (Roma - amor), calambures (esconde - es conde), trifelios (monja - jamón), las palabras encadenadas,… y tantos otros juegos de palabras son recursos para el entretenimiento que enriquecen el léxico y alimentan la imaginación. Internet puede ser muy útil para seguirles el rastro.