
Por montera
Mariló Montero
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Papas con choco
Con la certeza absoluta de su merecimiento, estas papas con chocos no pueden ir dedicadas esta semana a otra persona que no sea Concha Pérez Blanco. Porque nos ha dado una verdadera lección de cómo hay que defender lo nuestro. Porque ha demostrado querer y, sobre todo, defender a su Huelva por encima de sus propios principios. Porque no tiene filtros y es encantadora. Porque dice que le encantan las papas con chocos. Y por la que ha liado el pollito…
Como ya todos conocerán, doña Concha, a su edad, ni corta ni perezosa, un 2 de enero mismo cogió su teléfono móvil y le envió un wasap al mismísimo ministro de Transportes, Óscar Puente. Precisamente no le enviaba el mensaje típico que solemos mandar por esas fechas de feliz entrada de año… que también, pero la finalidad de doña Concha no era otra que exponerle su caso particular, como una choquera más, y mostrarle su ilusión de poder disfrutar, tanto ella como sus hijas, de unas infraestructuras dignas y acordes a los tiempos actuales. La respuesta, y todo lo acontecido posteriormente, todo el mundo la conoce.
Pese a que, según los plazos establecidos, muy probablemente nos vayamos allá por el año 2042 coincidiendo con el 550 aniversario del Descubrimiento de América, quisiera darle las gracias al ministro, ya no por la gestión sino por el detalle con doña Concha.
Desde entonces hasta hoy, sueño que algún día en mi teléfono móvil reciba un wasap de un número desconocido, bien de su gabinete o del propio ministro, como hizo doña Concha, y leer en ese mensaje: “Estimado Chungaleta. Dado que aún le tengo bloqueado en la red social X, mediante el mismo le comunico mi rectificación y en breve procederé a desbloquearle, porque debido a una saturación procedí de forma equivocada a bloquearle. Aprovecho también la ocasión para mostrarle mi predisposición para tener un encuentro con usted, cuando la agenda me lo permita. Un saludo buenoayyyy”.
Ante ello, ya ando preparándome la respuesta y prometo tener un detalle con él similar al que tuvo con doña Concha. Barajo diferentes ideas sin descartar ninguna y prometo ser original. Chungalistas y onubenses míos, que el espíritu de doña Concha nos guíe en el duro camino para valorar, reclamar y defender lo nuestro, lo que nos compete desde Ayamonte a Matalascañas y desde Encinasola a Punta Umbría. Os mantendré informados si el ministro me envía el deseado wasap.
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