Negligencias y mentiras

12 de octubre 2024 - 03:07

La verdad es que como ciudadano ejerciente de un voto, libremente expresado, me quedo sorprendido al comprobar cómo, una vez más, determinados representantes electos puedan incurrir en una irresponsabilidad tan absoluta como la de los representantes del PP y VOX en la Comisión de Justicia del Congreso -por extensión, sus respectivos partidos- que les involucra finalmente a todos los de ambos grupos, en una reforma legal que permitirá un claro beneficio penal a muchos de los más sanguinarios asesinos de ETA, no precisamente arrepentidos de sus terroríficos desmanes. No será porque los procedimientos parlamentarios vayan contrarreloj y no puedan estudiarse a fondo los temas. Pues bien, esta falta de aplicación de sus señorías, solo tiene un calificativo: negligencia.

Batacazo parlamentario, no el primero, del PP que ahora pide perdón, como para no hacerlo, máxime en tema tan sensible y argumentario cierto pero no excluyente de la negligencia sobre la nula incidencia en el resultado final dada la mayoría gubernamental, pero han evitado el debate esclarecedor de la ignominia sanchista en un ejercicio más de “cambio de opinión”, así como su falta de respeto y traición a las víctimas por quienes ayer disparaban a sus familiares y hoy negocian en los despachos beneficios para aquellos ejecutores violentos.

El perdón, puede honrar a quien lo pide, pero no obvia la ineptitud, la dejadez y la torpeza de personajes elegidos, se supone, por su cualificación, como tampoco las consecuencias negativas de tan errónea decisión.

Naturalmente, el inquilino de la Moncloa, una vez más y demostrando su falta de respeto parlamentario, se carcajea desde la tribuna y lanza semillas de incertidumbre: “usted no lleva el volante”, afirmará frente a Feijóo, en un ejercicio de maquiavelismo que, tal vez, algún día le tocará sufrirlo a él.

Aunque no es menos cierto que al olor del Poder, empiezan a sobrar arribistas y faltan activistas con talento, que están olvidados por la dirigencia popular. Ellos sabrán y más conociendo que Andalucía es territorio principal a recuperar, si el sanchismo pretende perpetuarse, electoralmente, en la Moncloa.

Y ya, como regodeo ante el “error” de los peperos, nos sale la portavoz -menos mal que se apellida Alegría y no Angustias- porque hace paralelismos lingüísticos en sus intervenciones con su nombre en un contorsionismo dialéctico para que la realidad quede opacada por sus mentirosos relatos en un alarde de manipulación informativa huidizo de cualquier verdad porque el dogma relativista impone que no hay distinción entre verdad y falsedad.

Como dijera J.F. Revel: “de las fuerzas que dirigen el mundo, la mentira es la más potente”. Así que entre negligentes y mentirosos, “literal” estamos arreglados.

stats