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Huelva/EL día 30, lunes de la semana que viene, habrá campanadas de fin de año adelantadas en Jabugo, al mediodía. Allí, por supuesto, a bocado de jamón en vez de uvas, para abrir el apetito justo antes del almuerzo. Un espectáculo.
Antes, el día 27, en Ayamonte, la fachada de su extraordinaria iglesia parroquial de las Angustias será pantalla para la proyección de un espectáculo audiovisual, un videomapping, del que ya han disfrutado sus vecinos un avance.
Entre caminos y bosques serranos, emerge mágico Castaño del Robledo. Tras su fabulosa iglesia catedralicia a medio acabar, las calles lucen colores de hilos y lanas tejidas con ganchillo por ocho mujeres para que brille como nunca su encantador pueblo en estas fechas.
Este mismo fin de semana también hemos visto en Tharsis a los Reyes Magos recogiendo el oro de la mítica Tarsis para su ofrenda en Belén, como la propia Biblia recoge y así los tharsileños se encargan de recrear junto a las minas que se explotaban más de un par de milenios atrás.
En un momento, aquí, cuatro planes en diferentes puntos de la provincia de Huelva para estas semanas navideñas. Son días que invitan a salir de casa y aprovechar las vacaciones para disfrutar de las fiestas y del tiempo libre. ¿Y por qué no hacerlo en Huelva?
El sector turístico onubense dio a conocer esta semana sus previsiones de ocupación en establecimientos de la provincia para las navidades. Después de unos números fantásticos en el puente de diciembre, ahora se esperan por debajo del 50%, pese a que ahora se viaja cada vez más en estas fechas y que, para quien lo hace, Huelva puede ser uno de los mejores destinos posibles por su gran oferta.
Es cierto que participamos con el hándicap de las infraestructuras. Pero en estos casos, el visitante que se mueve es de proximidad, nacional y regional, con movilidad por carretera. Y también puede ser provincial. ¿Por qué salir fuera cuando tenemos tantas cosas, y tan buenas, en esta provincia nuestra?
El lunes pasado publicamos en Huelva Información una revista, Navidad en Huelva, dedicada, como cada año en estas fechas, a las fiestas en nuestra capital y nuestros pueblos. Es una gran guía para tener a mano cada fin de semana, cada tarde, cada día de vacaciones, para descubrir planes, redescubrir destinos y recordarnos que tenemos una provincia de la que sentirnos muy orgullosos.
La capital se llena cada día de visitantes de nuestros pueblos para vivir con intensidad las actividades y la profusa decoración navideña en una ciudad rebosante de buen ambiente y alegría.
En los pueblos ocurre igual. Cada uno, con su programa especial que recogemos en la revista, con su singularidad y belleza particular, su gastronomía y su hospitalidad. Todos son grandes opciones para una escapada navideña. Y para quedarse un fin de semana, o varios días más, en un alojamiento rural o en un hotel urbano; quizá en alguna de esas joyas arquitectónicas restauradas y reconvertidas en hospederías con encanto serranas.
Hay onubenses del interior que pueden vivir unas vacaciones muy especiales en la capital o en la costa. Y costeros que sólo necesitan conducir hacia el norte, al Andévalo o la Sierra, para disfrutar del encanto de una tierra que es suya también.
Pueden conocer una explotación minera en la Riotinto Experience, subir las laderas del castillo de Aracena, pasear por la playa en El Rompido o Mazagón, tomar café en El Cerro o Almonte. Y no dejar por conocer el Belén Viviente de Beas o de Corrales, la cabalgata de Higuera o el desfile de la víspera en Huelva capital.
Conocer nuestra propia provincia, nuestra ciudad y nuestros pueblos, y pasar la noche en ellos, es una buena forma de disfrutar todo lo bueno que tienen sin necesidad de irnos más lejos. Ni de que nadie de fuera venga a descubrirnos lo que realmente sólo conocemos de oídas.
Tenemos el privilegio de poder recorrer nuestra provincia con más facilidad que nadie. Y también tenemos la obligación moral de visitarla para contarlo luego, defendiendo nuestra tierra y ayudando a mejorar los números de su economía. Y las navidades son una ocasión fantástica para eso.
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