Al-Munastyr disfruta de sus XVI jornadas islámicas pese al clima

Almonaster la Real es un pueblo de merecida y obligada visita en la Sierra, pero más aún en determinados momentos del año como en sus Cruces de Mayo, la Romería de Santa Eulalia, y ahora, durante las Jornadas de Cultura Islámica que de forma callada y exitosa se acercan a la mayoría de edad.

Almonaster demuestra una edición más, y ya van dieciséis, su pasado de forma humilde y sencilla. Religiones, pensamientos, culturas, tradiciones, historias, personas de variadas procedencias, diversión y entretenimiento, fiesta y buen rato en familia. La confluencia perfecta de dos culturas tan distantes, enfrentadas en su momento y ahora en paz y convivencia, grata, en Almonaster.

El ambiente es especial. Detalles muy bien cuidados, limpieza extrema, bonitos paisajes y con la mirada siempre al fondo con la Mezquita como observadora y punto final. Pronto se divisa la Iglesia de San Martín, restaurada hace pocos años y de belleza noble. Bonita siempre la entrada oficial al Zoco, gratuito como todas las actividades de las jornadas, y poco a poco se suceden diferentes puestos del mercado y maravillas artesanas de la zona y delicias de territorios cercanos.

Este año como novedad el pórtico de acceso al zoco está antes que otras ediciones, junto al a travesía, y se agradece por la amplitud y ambiente desde el principio. El único hándicap fue la meteorología porque durante todo el día estuvo el cielo nublado, tiempo muy cambiante en todo momento, momentos de lluvia y otros que no, aunque mejor que las primeras previsiones y que el sábado del pasado año.

Para hoy domingo las previsiones son de lluvia para toda la jornada, aunque habrá que ver la evolución del día. Sea como fuere, y aunque reste afluencia de público, las jornadas nunca se suspenden por el tiempo.

Cuanto más se accede a la morería, centro de la localidad, el olor se acrecienta, el ambiente aumenta, la música domina el aire, y el apetito se incrementa por momentos con manjares islámicos y apetecibles. Un zoco compuesto de calles estrechas, con telas y colgaduras a uno y otro lado, con un colorido llamativo y que hace mirar al cielo.

En la plaza de la Constitución, muy diferente al día a día, se observa la fachada del consistorio serrano muy cambiada y con pasado claramente musulmán. Allí hay animación en la calle y tres dromedarios que causaron sensación entre el público, en especial a los más pequeños.

Subiendo hacia la Mezquita se agolpan los puestos del mercado y morería. Todo cuesta arriba, pero con la cercanía geográfica y poder divisar aún de lejos la gran joya arquitectónica del mundo islámico en la Sierra, nos adentramos en un recinto que también tiene su mercado y singular campamento.

Entrar en la Mezquita supone algo especial y estos días, además, hay allí musulmanes y es curioso apreciar por momentos sus ritos con todo el respeto y normalidad mientras numerosos visitantes ven la Mezquita y se hacen fotos para el recuerdo cuando el frío por momentos empezaba a hacer mella en los visitantes.

En el regreso al zoco se puede disfrutar también de las exposiciones dispuestas para esta edición y las conferencias del XI Simposio internacional, centrado este año en torno a la imagen y la palabra del Islam.

Durante la inauguración de las jornadas, el presidente de la Diputación de Huelva, Ignacio Caraballo, destacó la importancia de un evento cultural "que se ha convertido en referente provincial fruto del buen hacer y de la hospitalidad de todo un pueblo que ha sabido cuidar con mimo un legado patrimonial indiscutible".

La previsión de visitantes para este año, según el Ayuntamiento, de Almonaster, se sitúa entre las 15.000 y las 20.000 personas.