El PP critica el coste de un PGOU copiado en parte de las normas subsidiarias

El documento de avance inicial del Plan General de Ordenación Urbana de Aracena (PGOU) se encuentra en exposición pública durante dos meses para que todos los ciudadanos y colectivos sociales puedan consultarlo y, a su vez, puedan realizar posibles alegaciones. Este importante proyecto para el futuro y desarrollo de la ciudad en los próximos años tras su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia estará a disposición de cualquier ciudadano hasta el próximo 17 de noviembre.

Al margen del espectacular desarrollo urbanístico experimentado por Aracena en la última década equiparando la localidad a zonas como el Aljarafe sevillano y las críticas de la oposición a la carencia de viviendas sociales ante la multiplicación de los precios, la principal crítica popular se basa en que el Ayuntamiento ha pagado 120.000 euros por la redacción de un documento que ha sido calcado en gran parte de las normas subsidiarias.

El Partido Popular, representado en el Pleno por Óscar Juan Hernández López, votó a favor de la tramitación para la exposición pública del PGOU en julio. Sin embargo, cuando han tenido el documento en sus manos "hemos apreciado algunas irregularidades y fallos en cuanto a la mención de algunos artículos de un proyecto cuya redacción por un equipo de arquitectos tras licitación pública ha costado en torno a los 120.000 euros para las arcas municipales", según indicó el presidente del PP de Aracena Iñigo Amián.

La denuncia más sorprendente es que según ellos "una parte importante del documento del PGOU, en concreto desde la página 92, está copiado literalmente del proyecto de las anteriores normas subsidiarias". Incluso colocan como ejemplos la existencia de varias referencias a artículos de la LOUA (Ley de Ordenación Urbana de Andalucía) que ni existen porque se menciona en un momento el artículo 242 cuando la LOUA sólo posee 226 artículos, indicó Iñigo Amián.

Además, desde el Partido Popular de Aracena han denunciado que en esta parte del proyecto aparece "todo el texto copiado literalmente salvo el cambio de los términos de LSA (Ley de suelo de Andalucía) por el de LOUA y el de normas subsidiarias por el de PGOU" apostilló Iñigo Amián.

El alcalde de Aracena, Manuel Guerra, ha explicado que "no se debe confundir a la población sino corregir y resolver aquellas anomalías que recoja el texto o erratas tipográficas" además de que precisamente en estos dos meses de periodo de alegaciones "está abierto el plazo entre otras cosas para esas cuestiones que luego en el documento definitivo deben plasmarse de la forma más certera y completa posible".

Otra de las indicaciones al documento inicial del PGOU ha sido que tiene carácter indefinido y que no establece una vigencia al proyecto, ni mínimos ni máximos. Pero en este aspecto Manuel Guerra ha señalado que "los nuevos planes parciales incorporados al PGOU si que tienen un periodo claro de vigencia para su ejecución".

Manuel Guerra también quiso mostrar que "todas estas alegaciones sean siempre mejoras positivas para un proyecto que marcará el presente y futuro a corto plazo" de la ciudad aracenense. Incluso comentó que es "lógico que aspectos de las normas subsidiarias aparezcan en el PGOU", ya que es un texto aprobado en el año 2003 y lleva sólo seis años de vigencia.

De ahí la necesaria incorporación de muchas cuestiones de esta norma en el texto del Plan General de Ordenación Urbana de Aracena impuesto por la Junta de Andalucía a todas las poblaciones .

Por otro lado, resulta algo contradictorio que el PP sea el único partido de la oposición que en la aprobación del documento durante el pleno de julio votara a favor y ahora mismo esté pidiendo todas estas modificaciones.

Desde el Partido Popular aseveran que votaron a favor de la tramitación y exposición pública porque aun no conocían su contenido. El PP no ha comunicado públicamente ninguna mejora o cuestión en torno a la parte más práctica de este PGOU como es la creación de más de 300 Viviendas de Protección Oficial, ampliación de más espacios verdes para la ciudad, reservar suelo para equipamientos públicos, y tener previsto suelo industrial para el movimiento económico y empresarial.

Aracena ha sido el pueblo serrano donde más ha crecido el parque de viviendas durante el boom del ladrillo. Hasta tal punto llegó el crecimiento que el precio medio de una vivienda nueva llegó a alcanzar los 130.000 euros.