El PP expulsa a Gonzalo Amador tras romper la disciplina de voto

Al igual que en la legislatura 2003-2007, el PP de Niebla vuelve a sufrir un nuevo cisma que se ha saldado con la expulsión de sus filas del portavoz del PP, Gonzalo Amador. Una decisión que se fragua después de que el joven iliplense rompiera la disciplina de voto y optara por no apoyar una moción cursada a instancias del PA y que los populares se comprometieron a respaldar. Tras consumarse la "indisciplina", los populares, por mayoría, acordaron expulsar a Amador, si bien la decisión no fue unánime y un vocal del partido decidió dimitir tras la decisión.

Los andalucistas vinculan este suceso con el caso de transfuguismo del año 2006, cuando la portavoz del PP, Adela Romero, optó de forma unilateral por romper el pacto de Gobierno que le ligaba al PA. El propio portavoz andalucista, Félix Castillo, acusa al PSOE de romper el pacto contra el transfuguismo, al entender que con este movimiento el partido de izquierdas recupera la mayoría absoluta mediante "prácticas poco ortodoxas y de poca moralidad política".

Desde el equipo de Gobierno salieron al paso de estas denuncias y criticaron que se trate de lanzar paralelismos con etapas anteriores puesto que, en este caso, son los socialistas quienes gobiernan en el municipio.

La propia alcaldesa, Laura Pichardo, censuró que el PA pretenda achacar la crisis interna que sufre el PP con un supuesto caso de transfuguismo, cuando "en ningún caso hemos hablado con el concejal popular. Nuestra intención es continuar gobernando en minoría", aclaró. La edil considera que el intento de vincular a su partido político con la expulsión de Amador obedece al interés de Félix Castillo por "buscar réditos políticos".

Por su parte, Amador tacha de "parodia" que el PA hable de transfuguismo cuando fue precisamente esta formación la que "traicionó a sus votantes. En primer término, proponiendo al candidato popular a la alcaldía, y, posteriormente, respaldando una moción de censura que fue la contraprestación al PA tras dar los socialista a Francisco Viejo (alcalde del PA por Niebla) la vicepresidencia de la Mancomunidad de Aguas y Servicios (MAS)". Precisamente, Amador censuró que "los andalucistas aprobaran en el municipio la ratificación del préstamo de 80 millones de euros suscrito por la entidad pública" y que conlleva que los iliplenses "paguen a diario más cara el agua".

Por esta razón, el edil ya ha avanzado que no renunciará a su acta de concejal tras "constatar el respaldo cosechado entre los ciudadanos, que me animan a continuar en política y me invitan a no someterme a intereses partidistas". Por todo ello, el edil afirma que sopesa la posibilidad de fundar un partido independiente "en el que prime, de una vez por todas, el interés de los iliplenses".

La legislatura en Niebla sigue así mostrándose convulsa. Las reñidas elecciones municipales de 2011 fueron ganadas por un PSOE que obtuvo cinco concejales, por cuatro de los andalucistas y dos del PP. En este escenario nadie quiso negociar un pacto de gobierno con el PA, que arrastraba un brutal desgaste. Muchos electores consideraron que había que jubilar al entonces alcalde Francisco Viejo, que volvió a repetir como candidato. Ante la tesitura de dejar gobernar al PSOE, contra todo pronóstico Viejo respaldó en el acto de investidura a Antonio Fernández (PP), que se convirtió en alcalde.

Gracias a este apoyo y sabedor de la imposibilidad de gobernar en solitario, los andalucistas forzaron una alianza que estalló por los aires sólo tres meses más tarde, mientras el líder del PA pasaba a ostentar la presidencia de MAS. Al cuatro mes Fernández recibía una moción de censura del PSOE y apoyada por el PA que ponía fin al mandato más efímero en la historia de la democracia de la provincia.

Este periódico ha intentado, sin éxito, conocer la versión del ex alcalde popular.