Plástico con destino a China
La empresa Antonio España e Hijos ha sido designada finalista por Huelva para los Premios Alas a la Internacionalización en la categoría de Iniciación a la Exportación. Esta modalidad premia el dinamismo en el comienzo de su actividad internacional a Antonio España e hijos, una empresa familiar de reutilización de residuos que actualmente comercializa sus materiales en China y Taiwán.
Esta empresa onubense trabaja desde hace cinco años en la exportación de plástico agrícola al mercado asiático, donde están surgiendo economías emergentes (China, India, Pakistán) que necesitan materias primas como ésta.
Antonio España e Hijos se encarga de eliminar los materiales plásticos procedentes de la actividad agrícola en la provincia de Huelva, tras el convenio firmado con el Consorcio Onubense para la Eliminación de Residuos Plásticos y Biomasa. El Consorcio y todos los ayuntamientos agrícolas que lo integran han depositado su confianza en esta empresas que se ha comprometido a gestionar los residuos que produce nuestro sector hortofrutícola, especialmente las fresas, frambuesas y arándanos. Previamente los plásticos se depositan en los centros municipales de transferencia en una fase preliminar, desde dónde son trasladados a las a la empresa.
La compañía está construyendo en la actualidad una planta de reciclado de plásticos, cuya primera fase estará terminada en este mes, según informó el director gerente, José España Prieto. Allí, el material será sometido a un procesos de trituración, limpieza y empaquetado para ser enviado a continuación al mercado chino.
Una vez que la planta esté fua pleno rendimiento, la idea de la empresa es seguir buscando nuevos mercados internacionales para la exportación de los plásticos. Por el momento en enero una delegación de la compañía se trasladará a China y Taiwán para ampliar la cartera de clientes que en la actualidad se cifra en unos 30.
Además de plásticos, esta empresa onubense exporta a los países asiáticos otros materiales, como aluminio, cobre, metales no férricos en general que también son muy demandados. Abundando en cifras, la venta mensual al exterior se cifra en unos 1.500 toneladas al mes, de las cuales 1.000 corresponden a plásticos y el resto a metales.
Antonio España e Hijos proyecta también ampliar su mercado de venta a otros países del área de oriente como India y a Sudamérica: Chile y Brasil son sus principales objetivos. Como en los casos anteriores se trata de zonas que apuntan a un crecimiento económico, que también están demandando estas materias primas.
José España tiene claro que la empresa que no se plantee el "salto" tendrá dificultades para seguir adelante, ya que la actividad económica se ha trasladado de Europa y en menor medida de América, al mercado asiático, lo que supone un "riesgo", pero también nuevas experiencias y ocasión de negocio.
La empresa es consciente que introducirse en nuevos mercados encierra dificultades, debido a los requisitos que se precisan para la exportación y la consecución de las licencias para desarrollar la actividad mercantil. En cualquier caso, al igual que el resto de las empresas que decidan emprender dicha actividad, cuenta con la ayuda de la Agencia Andaluza de Promoción Exterior (Extenda) y la Cámara de Comercio de Huelva que han prestado su colaboración al proyecto.
La compañía mantiene la filosofía de "estar en la vanguardia y en la primera línea de mercado" en la recuperación y reutilización de residuos industriales y urbanos, y su "preocupación por el medio ambiente". De hecho, patrocina el Máster de Medio Ambiente de la Universidad de Huelva, entre otros eventos relacionados con este tema de tan actualidad.
España e Hijos es una empresa familiar fundada en el año 1954 por Antonio España Lavado. A partir de 1986, experimentó transformaciones propias que la llevan a ser una compañía moderna diversificando su actividad. Así, la empresa es un centro autorizado de tratamiento de vehículos fuera de uso (V.F.U.), realiza la gestión de residuos peligrosos y no peligroso, demoliciones industriales y servicios a la industria, el desmantelamiento de naves de uralita, compra y recuperación de metales, chatarras, plástico, cartón, papel, etc y cuenta con un almacén de hierro nuevo y productos siderúrgicos, de corte a medida. Recientemente ha puesto en marcha en las instalaciones de Joaquín Turina, en Huelva, un destructor de documentación confidencial que pone a disposición de empresas y administraciones públicas, equipo muy demandado por la necesidad de desprenderse de toda documentación.
La empresa está registrada en AENOR, con las certificaciones de calidad y medio ambiente (ISO-9001 e ISO-14001).
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