El Pleno asume las modificaciones de Urbanismo sobre el PGOU

El Ayuntamiento de Aracena ha celebrado un pleno extraordinario con un solo punto en el orden del día relacionado con el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), a la que asistieron todos los miembros del Pleno más Víctor García, arquitecto técnico municipal, que respondió a todas las cuestiones de los concejales.

Una sesión extraordinaria y convocada con celeridad, ya que hoy la Comisión Provincial de Ordenación del Territorio y Urbanismo aprobará, seguramente, el PGOU aracenense, pero antes pedía la consideración del pleno en tres cuestiones casi de mero trámite y que no alteran el contenido del texto: una de ellas la reducción del número de viviendas en un nuevo plan parcial. La convocatoria extraordinaria se debe a que el Ayuntamiento tiene que remitir con al menos 24 horas de antelación a la reunión de la comisión lo aprobado en pleno.

En el caso de que ésta apruebe el documento volverá al pleno para ratificar el texto refundido, ya definitivo, y recogiendo todas las modificaciones parciales que se han ido aprobando en las distintas sesiones plenarias. El PGOU lleva encima de la mesa unos siete años, un tiempo según los grupos políticos excesivo para un texto que no aporta grandes cambios con los planes urbanísticos actuales para Aracena. Un retraso, aluden, relacionado con la burocracia, ya que han sido muchas las aprobaciones, en diferentes fases, y sus correspondientes periodos de exposición pública además de un exhaustivo estudio.

Este punto extraordinario ha sido aprobado en solitario por el PSOE, con la abstención del PP y el voto en contra de IU. La oposición denunció la celeridad de convocar el pleno y, sobre todo , las pocas horas para poder estudiar el contenido del mismo (tarde del lunes antes de la sesión).

La particularidad del PGOU es que no cuenta con grandes cambios en cuanto a aumentos de suelo urbanizable porque las actuales normas subsidiarias establecían un crecimiento importante como se ha comprobado en Aracena durante los últimos años pese a que estaba prevista su ejecución, inicialmente, a diez o quince años vista.