Cartaya sufre una oleada de robos en casas de campo durante las Fiestas Patronales

La reja de una ventana arrancada en una de las casas de campo asaltadas / M.G.

Cartaya/Numerosas casas de campo de Cartaya fueron objeto la pasada semana, coincidiendo con la celebración de las Fiestas Patronales en honor a la Virgen del Rosario, de desvalijamientos, robos o intentos de robo, aprovechando los momentos en que sus propietarios se encontraban en el recinto ferial.

Así lo han indicado a esta redacción algunos de los afectados, que han precisado que los robos se han producido, en muchos de los casos, en casas que son vivienda habitual de sus propietarios, y en otros siendo segundas residencias, de ahí que el valor de lo sustraído en unas y otras varíe bastante, según los casos.

Los autores de los robos también han roto los vallados perimetrales de las fincas, como el de esta imagen / M.G.

Los afectados, así como otras fuentes consultadas por esta redacción, hablan de que las casas de campo asaltadas podrían haber sido hasta una decena, aunque por el momento no han trascendido datos concretos sobre el número de inmuebles afectados por esta oleada de robos.

En la mayoría de los casos, el modus operandi de los autores de los asaltos ha sido prácticamente el mismo: esperar a que los moradores de los inmuebles se ausentasen de ellos para pasar un rato de ocio en el recinto ferial de Cartaya, aprovechando esta circunstancia para entrar en las casas rompiendo en primer lugar los vallados metálicos de las fincas, para después forzar o arrancar de cuajo la reja de alguna de las ventanas. Una vez dentro han procedido a registrar los inmuebles, llevándose todos los objetos de cierto valor que han podido encontrar.

Las viviendas afectadas han sido totalmente registradas y desvalijadas como se ve en esta imagen de una de ellas / M.G.

Los afectados consultados por esta redacción han descrito el robo en sus casas de campo de pequeños electrodomésticos, material informático, dinero en metálico, algunos enseres personales más valiosos y hasta escopetas de caza, siendo imposible por el momento hacer un cálculo del valor de todo lo sustraído.

La situación ha provocado cierto temor y angustia entre los vecinos de Cartaya, que no paran de hablar de este asunto en los bares y comercios locales desde la conclusión de las Fiestas Patronales este pasado domingo.