Condenado a 9 años de cárcel por intentar estrangular a su expareja en Cortegana: un vecino escuchó gritos de auxilio y acudió al lugar

Huelva/La Audiencia Provincial de Huelva ha condenado a un hombre a nueve años y tres meses de prisión por intentar estrangular a su expareja, de la que tenía orden de prohibición de comunicación y de alejamiento, colocándole una cuerda alrededor del cuello y propinándole golpes en la cabeza. La sentencia lo considera responsable de asesinato intentado, con la circunstancia agravante de género y la atenuante de toxicodependencia, por el que le impone la pena de ocho años y seis meses de prisión, así como prohibición de comunicación y de aproximación a menos de 500 metros respecto de la mujer durante un período de quince años.

Además, se le prohíbe entrar y residir en el término onubense de Cortegana, donde residía la mujer, por idéntico período, así como libertad vigilada por un período de diez años. También se le responsabiliza de un delito continuado de quebrantamiento de condena, por el que suma la pena de nueve meses de prisión.

En concepto de responsabilidad civil, el hombre indemnizara a la mujer con 10.800 euros. Se considera probado que el acusado, condenado en firme como autor de un delito de maltrato de obra, un delito continuado de amenazas y un delito de lesiones graves, todos en el ámbito de la violencia de género, a la pena, entre otras, de nueve años de prohibición de aproximación a menos de 200 metros de la mujer, mantuvo contacto a diario con ella desde febrero a marzo de 2022 a través de llamadas de teléfono, mensajes de Whatsapp, y encuentros en persona.

La mañana del 3 de abril de 2022, el acusado, con intención de acabar con la vida de la mujer, y con conocimiento de la orden de alejamiento, accedió a la vivienda de ella, tras facilitarle ella el acceso, en Cortegana.

Una vez dentro del domicilio, él, que portaba una cuerda blanca con un nudo corredizo, se dirigió contra ella intentando introducir el lazo por su cabeza con la intención de estrangularla, al tiempo que le decía: "¿ves esta cuerda? Es para matarte, si no eres para mí no serás para nadie".

El acusado la empujó haciéndola caer, la golpeó fuertemente en la cabeza en reiteradas ocasiones, le metió los dedos en la boca con la intención de doblarle el cuello y le mordió en el codo. Ella, que opuso gran resistencia forcejeando fuertemente con él, consiguió gritar para pedir auxilio, lo que provocó que en el lugar se personase un vecino, lo que provocó que el acusado saliese huyendo después de provocar a la mujer varias lesiones.