Curro Azcárate Caballero-Infante: Gran navegante y aparejador

Huelva/Curro es más de Huelva que muchos huelvanos, aunque circunstancialmente nació en Sevilla porque su madre era de allí y fue a parir al niño a la Clínica de Fátima. No obstante, a los tres días ya estaba en su Huelva. Esto ocurrió a comienzo del mes de marzo de 1971. Su padre era una persona muy conocida en Huelva, don Pedro Azcárate, que era un prestigioso traumatólogo, jefe de servicio del Hospital Manuel Lois y luego del Juan Ramón Jiménez, fundador de la Clínica Los Naranjos y, además, delegado provincial de Asisa. Una calle de Huelva fue rotulada con su nombre por los muchos méritos que hizo como médico en la ciudad. La madre de Curro, Josefina, siempre ayudó a su padre en su consulta privada, sin dejar por ello de atender a sus cinco hijos.

El pequeño, Francisco Azcárate, fue al Colegio Montessori, donde ya estaban sus hermanos mayores; y después al Instituto La Rábida, donde recuerda con mucho cariño a un buen amigo mío que fue su profesor, Manuel Sánchez Tello; y de quien también escribí en esta galería de personas de mi alma. Después por fin se fue a Sevilla a estudiar la carrera de Arquitectura Técnica y se hizo aparejador, que es cuando yo lo conocí, ejerciendo la profesión que desde pequeño le gustó. Dice que le encantaba el olor de las obras, ese olor tan especial que desprenden la unión de los ladrillos húmedos con el cemento. Cuando aún estaba en el colegio deseaba volver todos los días de las clases para ver la obra que estaban haciendo junto a su casa en la calle Puerto y observar con detalle cómo avanzaba día a día y olerla. Y a los pocos años, ya ejerciendo su profesión con dos buenos arquitectos, íntimos amigos de quien esto escribe, fue cuando lo traté por primera vez y ya desde entonces nos hicimos grandes amigos.

Y, casualidades de la vida, una tarde mientras trabajaba en mi estudio de la calle Palacio junto a mis compañeros Enrique González, Cristina Borrero y Adrián Oreña, llamaron a la puerta. Era una señorita mus simpática y guapa que preguntó por mí para solicitarme la cartografía de unas zonas en las que ella estaba trabajando, porque era aparejadora dedicada a las tasaciones. Naturalmente fue atendida a las mil maravillas, le facilitamos todo lo que pidió y se marchó muy agradecida. Al llegar a casa se lo contó a su marido y este exclamó: “¡Anda!, pero si has dado con mis buenos amigos los topógrafos, no me extraña que te hayan tratado así porque son un equipo maravilloso”. Curro ya nos quería mucho.

Pero él no solo vive para su familia y su profesión, sino que tiene una afición que heredó de su padre, la navegación a vela. Me cuenta que ama el mar y el viento y, por tanto, navegar es su verdadera pasión desde que tenía 10 años. Ha participado en numerosos concursos y regatas que, por cierto, ha ganado todas las locales. También ha sido campeón de España en dos ocasiones y de Andalucía dos veces. En la actualidad es el campeón de Andalucía con su barco llamado Trebolisimo II. También participó en el campeonato de España absoluto en Galicia, en el puerto de Baiona La Real, donde casualmente estaba yo pasando unos días y presencié la llegada de la embarcación que Curro tripulaba representando a nuestra comunidad. Y por supuesto también ha participado en la regata oceánica Huelva-La Gomera, que la ha hecho nada menos que 13 veces y ha batido el récord en cuatro ocasiones. Me lleno de orgullo cada vez que leo en la prensa deportiva los triunfos de mi buen amigo y también de haber navegado con él en su barco “Trebolisimo II” pero no en ninguna competición, sino pasando un día de recreo.

En el año 2000 se casó con Alicia y según me dice, es lo mejor que ha hecho en su vida. Tienen tres hijas que ya están terminando sus carreras universitarias. Alicia, la mayor, Ingeniería; María, la segunda, Farmacia; y Ana, la pequeña, Medicina, como su abuelo Pedro. ¡Ah!, y me dice que resalte que las tres son muy guapas, como su madre.

Empecé escribiendo que es un gran onubense y que ama a Huelva por encima de todo, así como a todo lo relacionado con nuestra tierra y su historia. Por eso coincido con él en La Real Sociedad Colombina Onubense, ya que ambos somos defensores de la gran gesta colombina. Además, en la actualidad es el secretario de la Asociación William Martin, que trata de difundir esta figura histórica y todo el legado inglés. También le gusta mucho la Semana Santa y pertenece a la Hermandad del Descendimiento, que fue fundada por su abuelo paterno y además fue el primer hermano mayor.

En el año 2018 fue distinguido con el Colón de Oro por su trayectoria deportiva. Y estoy seguro de que seguirá recibiendo más distinciones a lo largo de su vida porque es muy joven todavía y como deportista promete mucho. Además es una gran persona y muy amigo de sus amigos. Yo personalmente me siento muy orgulloso de serlo.