El dispositivo estival se queda un año más sin guardias civiles de sustitución
Las plantillas llegan a verse reducidas hasta un 33% en vacaciones · A este recorte hay que sumar los guardias de baja y los que realizaron horas extra que ya no se abonan, sino que se computan por descansos
La seguridad de los onubenses no es ajena a la crisis económica que vive el país. Como viene sucediendo desde 2008, tampoco este año el dispositivo estival de la Guardia Civil incorporará a agentes profesionales que refuercen las plantillas en los acuartelamientos costeros para cubrir los puestos de los que se marchan de vacaciones, según indicó ayer a este diario la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), que dejó claro que "no se trata de una situación excepcional".
Durante los meses de julio, agosto y septiembre, el 33% de los efectivos del Instituto Armado disfrutará del mes de permiso remunerado pertinente. En años de bonanza, el Gobierno central sufragaba las dietas y el alojamiento de guardias profesionales que se concentraban en los puestos costeros de la provincia para minimizar el impacto de la lógica reducción de personal. "Pero ahora no hay dinero para pagar nada", afirmación en la que coinciden tanto la AUGC como las fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva consultadas por este rotativo.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles calcula que cada unidad contará con entre siete y diez agentes menos: "Esto significa que habrá menos agentes en verano que en invierno, cuando la afluencia de personas es infinitamente mayor".
Y si no hay fondos para costear las concentraciones, tampoco lo hay para las horas extraordinarias. Desde el comienzo de este mes, el Ministerio del Interior ha eliminado las retribuciones por servicios prestados fuera del horario laboral. Tanto es así, que los que hubiesen superado las 37,5 horas semanales estipuladas también en los meses de abril y mayo tendrán que conformarse con transformar ese excedente en horas de descanso. Una medida con la que están muy molestos los trabajadores del Cuerpo.
Algunos de ellos "están de baja", explicó la AUGC. Sólo en la casa cuartel de Punta Umbría, por ejemplo, ocho de su medio centenar de efectivos se encuentra de baja. Es decir, que en este caso, si a los 17 agentes que se marcharán de vacaciones al mes se les suman los ocho de baja (25 guardias menos), resulta que sólo la mitad de la plantilla puntaumbrieña estará disponible durante el estío. A ello hay que añadir la acumulación de horas de descanso del personal, que por ende se verá abocado a realizar más horas extras para suplir a los compañeros ausentes y, claro está, a disfrutar de más tiempo libre en lo sucesivo.
Para muestra un botón. En la noche del pasado viernes, en Punta Umbría "sólo había un guardia para patrullar la calle y otro para vigilar la puerta, pero no teníamos gente del puesto para la instrucción de diligencias", detalló la AUGC. Y situaciones como ésta se han convertido en el pan nuestro de cada día "en todos los cuarteles costeros, desde Ayamonte a Torrelahiguera".
No obstante, esto no quiere decir que las localidades del litoral onubense estén sumamente desprotegidas durante el verano. El refuerzo llega de los puestos vecinos que se encuentran más hacia el interior, según confirmaron fuentes oficiales de la Benemérita. Esto es, patrullas de Aljaraque y Gibraleón abandonan su demarcación durante unas horas para vigilar Punta Umbría, o los de Moguer y Palos velan por la seguridad de Mazagón, y así sucesivamente. Para la AUGC, esta situación no deja de ser un despropósito, ya que provocará -como lo viene haciendo desde hace años- que "los pueblos limítrofes queden más desprotegidos".
2 Comentarios