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Lepe
Lepe/A la ya de por si penosa situación que viven diariamente en los asentamientos de infraviviendas ubicados en el término de Lepe aquellos que menos tienen, se sumó durante esta pasada madrugada un nuevo incendio en la zona situada junto al cementerio municipal de dicha localidad costera que ha calcinado entre 120 y 130 chabolas, que ha obligado al desalojo inmediato de una docena de inmigrantes, los cuales han vuelto a perder lo poco que tienen.
El panorama, el de otras tantas ocasiones ya que el suceso no es nuevo: desolación, bombonas detonadas, amasijos de tablas y plásticos calcinados, olor a goma quemada y caras de impotencia y mucha tristeza entre aquellos que han perdido hasta lo más valioso que tienen, sus papeles.
El servicio de Emergencias 112 Andalucía informó a primera hora de ayer en un comunicado que a la una de la madrugada el centro coordinador recibió la llamada de un particular que alertaba de un incendio en una zona de chabolas próxima a la avenida de Andalucía, cerca del cementerio.
En ese mismo momento el 112 activó a la Policía Local de Lepe, a los Bomberos del Consorcio Provincial contra Incendios de Huelva, a la Guardia Civil y a la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES) en caso de que fuera necesaria algún tipo de intervención, aunque finalmente no hubo que lamentar heridos.
Fuentes consultadas por Huelva Información señalan que el fuego tuvo su origen en la deflagración de una de las numerosas bombonas de butano que los inmigrantes usan para cocinar o calentarse, y que se encontraba en el exterior de una de las chabolas.
Nada más oírse la explosión, los asentados que había en ese momento en el campamento, los cuales estaban prácticamente todos ya durmiendo, según relató uno de ellos a esta redacción, se despertaron despavoridos y emprendieron la huida de las llamas, que en determinados momentos de la madrugada llegaron a alcanzar una altura considerable, siendo visibles desde muchos puntos del casco urbano de Lepe.
A la una de la madrugada, el 112 recibió la llamada de un particular que alertaba de un incendio en una zona de chabolas próxima a la avenida de Andalucía, cerca del cementerio y junto a un centro comercial.
El fuego quedó extinguido cerca de las cinco de la madrugada, siendo necesario durante las labores de extinción de las llamas el desalojo de una conocida hamburguesería que se encontraba abierta a esa hora en el parque comercial situado frente al asentamiento, sobre todo en prevención por la intensa humareda que se produjo.
Del mismo modo las llamas se quedaron a escasos metros de una gasolinera situada en el mismo parque comercial, quedando solo de por medio la avenida que da acceso al mismo y que concluye en el campo municipal de fútbol de Lepe.
Según testigos presenciales, durante el incendio se produjeron varias detonaciones por la gran cantidad de bombonas con las que cuentan las personas que viven en el asentamiento para cocinar y calentarse, muchas de las cuales fueron acumuladas en un punto concreto ya calcinadas para tenerlas más controladas.
El Consorcio Provincial contra Incendios, con dotaciones de los parques de Ayamonte y Aljaraque, Policía la Local de Lepe y la Guardia Civil actuaron durante la madrugada de forma coordinada en un suceso que ha afectado a unas dos hectáreas de terreno y que ha vuelto a encender todas las alarmas en Lepe sobre la penosa situación en la que viven los migrantes en este campamento de chabolas de cartones, plásticos y maderas.
Las personas desalojadas fueron trasladadas a las instalaciones del campo de fútbol de la localidad, donde fueron atendidas por los servicios sociales municipales a la espera de un posterior realojo.
La delegada municipal de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Lepe, Mariana Otero, calificó ayer como un "infierno" la situación vivida durante la madrugada en el asentamiento, a lo que añadió que ha sido clave que la campaña de la fresa no se haya aún iniciado este año para que no haya habido víctimas como consecuencia de este suceso.
En declaraciones a los periodistas en el lugar de los hechos, Otero explicó que nada más tener conocimiento del suceso fue activado "el dispositivo que tenemos en caso de emergencias como esta de forma inmediata", añadiendo que tras declararse el fuego "en cuestión de treinta minutos esto era el infierno, era muy alarmante, sobre todo porque era de noche y no se aprecian bien las consecuencias".
Mariana Otero también confirmó que en las dos hectáreas de terreno afectadas han ardido "entre 120 y 130 chabolas", explicando que no se han producido víctimas de forma "milagrosa", sobre todo "porque al ser temporada baja –en referencia a la campaña de recolección de la fresa– hay muchas chabolas vacías".
Por otra parte, concretó que las causas del incendio fueron "fortuitas", ya que debido a las bajas temperaturas que se están registrando estos días "seguramente alguien encendió una hoguera, y al ser de madrugada sólo les ha dado tiempo a salir corriendo y han perdido todas sus pertenencias".
La delegada municipal de Servicios Sociales añadió que en la localidad se trabaja en un proyecto que lleva por nombre Agenda 2020, en alusión a la fecha marcada como plazo máximo por las autoridades locales para erradicar el chabolismo en un término municipal donde hay, en temporada alta de la fresa (de febrero a mayo), más de 1.500 personas viviendo en estas condiciones según los datos que manejan algunas ONGs.
Para ello "tenemos, entre otras cosas, un registro de viviendas con ayudas para propietarios que las quieran poner a disposición de los inmigrantes, pero las herramientas que tenemos en las manos son las que tenemos", lamentó.
Otero también precisó que los inmigrantes desalojados como consecuencia del incendio seguirán en las instalaciones del estadio municipal de fútbol Ciudad de Lepe hasta que la situación se normalice, al tiempo que señaló que el Ayuntamiento de la localidad no tiene competencias para desalojar las chabolas de un terreno "privado" y "no municipal" que según agregó "lo ha comprado una promotora al banco e imaginamos que, posiblemente, ejercerá su derecho en algún momento".
La concejala lepera de Servicios Sociales indicó finalmente que entre las personas desalojadas se han repartido colchones, mantas y algo de ropa, así como han podido usar las duchas del estadio para asearse mientras se estudia su realojo.
Mientras tanto técnicos y voluntarios de la ONG Cepaim se trasladaron en la mañana de hoy al asentamiento siniestrado, donde comenzaron a atender y asesorar a los migrantes afectados con el objetivo de ayudarlos a recuperar o renovar los papeles que estos han perdido como consecuencia de las llamas. También acudieron al lugar voluntarios de Cáritas y de Cruz Roja con el objeto de prestar su apoyo en las primeras necesidades básicas de las que se han quedado desprovistas los afectados.
Por otra parte las críticas de la oposición en el Ayuntamiento de Lepe no se hicieron esperar y desde el Partido Socialista de la localidad lamentaron que el pueblo de Lepe "siga saliendo en los medios de comunicación por un nuevo incendio en las chabolas junto al cementerio, y ahora también junto a un parque comercial que visitan diariamente cientos de vecinos y personas procedentes incluso de los municipios cercanos".
"Después de más de quince años de existencia de este poblado chabolista –prosigue el PSOE– no hemos tenido un gobierno local capaz de darle una solución definitiva para que dejemos de ser el punto negro en incendios donde corren peligro las vidas de muchas personas, y sin un planteamiento serio y decidido de solución".
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