José Antonio Cabrera tras la denuncia del Ayuntamiento de Bonares: "Lejos de ayudar a las víctimas lo que hacen es taparlo todo"

Este viernes José Antonio Cabrera, padre de la joven que fallecía con 25 años hace unos meses tras un accidente provocado por animales sueltos en la carretera, prestó declaración en la Guardia Civil de Moguer tras ser demandado por el Ayuntamiento de Bonares por la aportación de documentos "de carácter privado del mismo consistorio", y que son partes diarios policiales en los que se muestra "que se han hecho las cosas mal".

Cabrera recibió la noticia esa misma mañana por una llamada mientras estaba dando clases en el instituto de Bonares donde es profesor de Física y Química. "Me extrañó la hora de la llamada, por eso lo cogí" narra asegurando que nada más colgar el teléfono se dirigió a Moguer junto a su abogado, José Luis Orta, para declarar. "Los policías fueron muy amables conmigo en todo momento" cuenta sobre su interrogatorio.

Ante la demanda comenta a este periódico que su abogado le ha pedido "tranquilidad", por lo que lo ha dejado en sus manos, a la vez que asegura que "ya lo he perdido todo", con relación a que no tiene nada más que perder tras la muerte de su hija aunque espera que sea "archivada".

Esta demanda, a su parecer, muestra que desde el consistorio "lejos de ayudar a las víctimas lo que hacen es taparlo todo" e insiste en que ha existido en las acciones para evitar la presencia de animales sueltos una "dejación de funciones clara". Añade que está seguro de una cosa "como que me llamo Jose Antonio Cabrera Ramírez que voy a terminar con este anacronismo de los mulos sueltos".

Réplica del ayuntamiento

Desde el consistorio han comunicado a través de sus redes sociales que no han realizado una demanda contra Jose Antonio Cabrera, sino una denuncia "la salida de documentos de la Jefatura de la Policía Local sin ninguna autorización y sin haber sido pedida ni por el juzgado ni la acusación". Una demanda que habría llevado a José Antonio Cabrera a recibir la citación de la policía para declarar en un interrogatorio.

La demanda llegaría por la entrega de forma anónima a Cabrera de un pen "que depositaron en la entrada a su vivienda en un sobre a su atención hace unos meses, y que puso a disposición judicial inmediatamente por considerar el denunciante que eran pruebas vitales", aclaraba el abogado.

Este pendrive contendría archivos consistentes en partes de trabajo de la policía local de Bonares que "acreditan la poca veracidad de la declaración del acusado, pues son innumerables los documentos durante varios años que manifiestan la presencia de Cipriano en muchos incidentes reiterados con animales sueltos, especificando de forma minuciosa dichos partes la hora y el contacto de la policía con el acusado en relación con estos temas".