La Laguna de El Portil vuelve a secarse en la recta final del verano

Huelva/Una de las joyas paisajísticas, turísticas y de conservación de especies de aves de la provincia de Huelva presentaba durante los últimos días una devastadora aunque familiar imagen. Amanecía prácticamente desértica tras el ecuador del mes de agosto, como ocurre desde hace décadas, con el año 2022 como fecha señalada ante los niveles mínimos que presentó.

Difícilmente levantará cabeza en septiembre. La Agencia Estatal de Meteorología preveía un final de verano "probablemente más seco de lo normal" -aunque no más seco que el anterior- en la provincia, afirmaciones que ya se traducen en la cantidad de agua embalsada, que caía en un -1.45 (-813hm3) con respecto a la semana anterior. Juan de Dios del Pino, delegado de AEMET en Andalucía, Ceuta y Melilla, hablaba de "primeras previsiones" cuando informaba acerca de pronósticos que contemplan pocas precipitaciones para el mes de septiembre en Huelva.

La última vez que se observaba la Laguna del Portil rebosante de agua era en octubre de este mismo año, cuando la borrasca Bernard arrasaba en la provincia al completo pero regalaba una imagen que llevaba décadas sin reproducirse, con la laguna en su máxima plenitud. La Asociación de Vecinos Portileños teme que se vuelva a repetir la situación en la que se encontraba el espacio en 2022, cuando "ni en invierno llegó a llenarse del todo". Prudencio Serrano, portavoz de la asociación, lamenta la pérdida recurrente del enclave natural que aunque cada año bebe de la lluvia, "también comienza a secarse antes".

La problemática atesta contra el sector turístico de la zona. "Cientos de personas que se interesan por las aves migratorias que allí se encuentran vienen a disfrutar de este espacio. Perdemos ese tipo de visitantes porque los animales se trasladan a otros humedales", cuenta Serrano. Además, no solo afecta al turismo, "el olor que deja cuando la laguna se seca, cuando pasa de ser un humedal a un espacio sin vida, es horrible y las casas más cercanas lo sufren".

La AVV Portileños -desde su posición de vecinos y no técnicos- habla de distintas versiones a la hora de responder al porqué de la desaparición estacional del humedal. Por un lado, "hay sectores que achacan la pérdida de agua a la existencia de campos de golf cercanos, otros hablan del cambio climático. Son las dos versiones que pueden ser una, otra o ambas".

Conocedores del tema, la Junta de Andalucía licitaba las obras de ejecución del proyecto de restauración en junio de este mismo año con la puesta en marcha de actuaciones concretas, con objeto de devolver la laguna a la vida. Según recogía la memoria, las actuaciones del proyecto para tratar de remediar las afecciones del humedal también se extenderían hasta otros de la provincia que se encuentran en situaciones similares, entre ellos Las Marismas de Isla Cristina, la Laguna de las Madres, la Laguna de la Dehesilla y el Estero Domingo Rubio en los términos municipales de Ayamonte, Isla Cristina, Moguer, Palos de la Frontera y en Punta Umbría.

El mismo proyecto señalaba como uno de los motivos de su degradación el hidroperíodo -disponibilidad de agua de un humedal que cuenta con patrón estacional e interanual de inundación-, así como la degradación debida a un camino que atraviesa su cubeta. Se proponía entonces la protección de su cubeta mediante la desviación del camino existente que la atraviesa actualmente. La señalización y cerramiento del mismo con el mismo objeto, que se respete la superficie del humedal y se protejan sus valores ecológicos.

Sobre los siguientes pasos, la AVV Portileños se reunirá con el delegado territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Pedro Yórquez, a finales de septiembre. "Vamos a reunirnos con él para conocer las actuaciones con exactitud y sus tiempos. Una de las actuaciones que tenemos previstas durante esa reunión será plantear a la Universidad de Huelva un estudio que verifique con exactitud el motivo exacto por el que la laguna se seca cada año".