La Copa del Rey pasa de largo por Huelva un año más
Mientras el club continúe en Primera Federación deberá quedar entre los cinco primeros para disputar el torneo del KO
Desde jugadores hasta presidentes: los recreativistas que han encarnado a los Reyes Magos en Huelva
Los primeros días del nuevo año son jornadas de Copa del Rey. Días de disfrute y algunas noches de gloria para los más humildes. El Recreativo de Huelva vuelve a ver como espectador por la televisión un año más el torneo del KO. Para recordar la última aparición de los onubenses hay que remontarse a noviembre de 2023 y casi mejor no hacerlo para evitar un disgusto.
El Decano guarda entre sus páginas más ilustres algunos momentos históricos en la Copa, como la final de 2003, pero en los últimos años esta fiebre copera apenas ha podido calar en un club que, seguramente, verá con envidia sana con los pelotazos de equipos como el Pontevedra o el Ourense, dos de los modestos que se han colado en los octavos de final a costa de un Primera.
La realidad es que se ha multiplicado la dificultad para lograr un billete para la Copa. Solo los cinco primeros de cada grupo obtienen la clasificación copera, sin contar a los filiales en caso de que acaben entre esas posiciones. Esto quiere decir que lo consiguen sendos campeones y los ocho conjuntos que disputan el playoff de ascenso (cuatro por grupo). El resto de mortales, los otros 30 clubes, se quedan sin nada.
Lo cierto es que en los últimos 20 años se pueden contar con los dedos de una mano las alegrías coperas. La hazaña más sonada se produjo en la campaña 19/20, cuando los albiazules se plantaron en dieciseisavos de final después de superar a Hércules y Fuenlabrada. Allí esperaba Osasuna, de Primera División, y los de Alberto Monteagudo estuvieron a punto de dar la sorpresa.
Morcillo y Roncaglia, en propia puerta, le daban una ventaja de dos goles al Recreativo de Huelva que ponía un pie y medio en los octavos de final. Sin embargo, los goles de Brasanac, Chimy Ávila (en clara falta no señalada por Gil Manzano) e Iñigo Pérez terminaron de echar por tierra las opciones de clasificación para los onubenses.
Más allá de aquel partido, el Decano no ha tenido suerte en una competición que como mínimo no volverá a jugar hasta finales de año. Las eliminaciones contra Tudelano y Burgos, ambas en circunstancias muy diferentes, son los últimos precedentes del club en el torneo del KO, que tiene y tendrá siempre un sitio especial en la historia de la entidad más antigua de España.
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