Elegancia y clasicismo blanco en San Sebastián

LOS Mutilados no agotaron la hora de demora que pidieron y salieron a la calle a las 18:47 para ir temporalmente en sintonía con las otras tres hermandades que procesionaron en un Domingo de Ramos marcado por la incertidumbre ante el peligro de lluvia. En ese momento la nueva Cruz de Guía, un estreno a cargo del isleño Daniel Sánchez, cruzó el dintel de San Sebastián.

La Real e Ilustre Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Victoria, Nuestra Señora de la Paz y San Rafael Arcángel, fundada en 1943 por antiguos excombatientes de la Guerra Civil (ese mismo año realizó su primera salida procesional), llenó de clasicismo la jornada de ayer, cuando los nazarenos de los tramos del paso de misterio bajaron desde la plataforma de la iglesia, en Federico Mayo, vestidos con su característica túnica blanca y capa de raso blanco, con cíngulo y morrión negro.

A las 18:51 se levantó el paso de misterio con la talla del Santísimo Cristo de la Victoria, una obra del escultor ayamontino Antonio León Ortega de 1945, autor asimismo de su misterio procesional (1953-1955), en el que se representa el momento en que Jesús es despojado de sus vestiduras por dos sayones, mientras que otro prepara la cruz. La imagen fue restaurada por el matrimonio jerezano Isaac Navarrete y Rosario Lorente en 1985.

La cofradía, cuyo hermano mayor es Diego Cabrera, sigue restaurando su patrimonio con los candelabros del paso de misterio, cuyos capatazes son Jesús Cabrera y Pablo Camacho. Con claveles rojos, el paso fue portado por sus costaleros hacia Mackay Mcdonald, para tomar después la Plaza Quintero Báez e Isabel II, antes de entrar en carrera oficial.

A las 19:20 se llenó de blanco la tarde, cuando tras los nazarenos -con el morrión en raso celeste al igual que el cíngulo- la imagen de Nuestra Señora de la Paz, con una rama de olivo, símbolo de la paz en la mano, salió a la calle, vestida por Rafael Infante. Los capataces, José María García y José Manuel González guiaron a los costaleros de este paso, adornado por un bello exorno floral compuesto por rosas blancas y azahar, de la mano de Josechu Llanes.

La talla es obra de Antonio León Ortega de 1944, si bien fue intervenida por Antonio Díaz Roca en 1983 y Luis Álvarez Duarte en 1992. Sustituye a una talla de Federico López Pereira de 1943, que procesionó solamente un año.

La Filarmónica de Pilas acompañó a la Virgen de la Paz y la bajada por la rampa de la parroquia, cargada de espectacularidad, provocó el emocionado aplauso del numeroso público congregado en las inmediaciones de la iglesia. San Sebastián volvió a dejar claro que es lugar cofrade por excelencia.

Una vez en Carrera Oficial, la cofradía se refugió, poco después de las 22:10, en la parroquia de la Purísima Concepción, debido al chaparrón que cayó en la jornada del Domingo de Ramos. A las 00:30 se volvieron abrir las puertas de la iglesia y la cofradía retorno de manera ligera a su templo de San Sebastián por el camino más corto, cuando había dejado de llover.