Huelva espera ilusionada la Semana Santa en un año muy especial

Huelva/La Cuaresma ha empezado con la máxima ilusión en Huelva por vivir la Semana Santa este año con intensidad, en un año muy especial para todos. Y con la ilusión de un niño viendo cofradías en la calle, esta semana comienza un nuevo y renovado ciclo de la Tertulia Cofrade El Aguaó, el foro de este tipo más veterano en Huelva, organizado por Huelva Información, esta vez con el patrocinio del Ayuntamiento de Huelva.

Los salones de Gilda, un espacio único en la Casa de la Dinastía Litri, acogen de nuevo este evento semanal de la Cuaresma onubense, siempre con el buen gusto a la hora de decidir y pensar las cosas. La Tertulia Cofrade El Aguaó ha dejado claro que ha vuelto de la mejor forma posible.

Con un ligero aroma a incienso, un nazareno en penitencia junto al periódico del día presidiendo la mesa, un cántaro de barro y sus jarrillos, seña de identidad de El Aguaó, y unas buenas torrijas, dio comienzo un rato de reflexiones y conversación sobre cofradías en Huelva. La ambientación perfecta, salvo por lo que ocurría fuera, cayendo agua del cielo, como sucedió durante toda la Semana Santa pasada. Como bien se apuntó, esperamos que la lluvia en Cuaresma de paso a una Semana Mayor radiante en la calle.

El ambiente nos adentraba a las sensaciones que deja esa última mirada a un palio que se aleja, dejando en el aire el olor a cera y la belleza de lo que es eterno.

Los tertulianos

Para esta primera chicotá del ciclo de tertulias de Cuaresma, El Aguaó tuvo el placer de contar con unos tertulianos con experiencia y un profundo conocimiento para hablar de cofradías.

Los encargados de inaugurar esta primera tertulia fueron el concejal de Cultura y Patrimonio Arqueológico de Huelva, Ignacio Molina; el director espiritual del Consejo de Hermandades y Cofradías de Huelva y párroco de la Parroquia Mayor de San Pedro, Francisco José Feria; el hermano mayor de la Redención, Rafael Domínguez; el periodista e investigador onubense, además de fundador de esta tertulia cofrade, Eduardo J. Sugrañes; el director de Huelva Información, Javier Ronchel; y quien suscribe, colaborador de Semana Santa del periódico, y Daniel Fontenla.

Huelva espera ilusionada

El primer tema que se puso sobre la misma, como no podía ser de otra manera, fue la manera en que Huelva espera vivir una Semana Santa sin problemas meteorológicos, como el año pasado, esta vez con los pasos y los nazarenos recorriendo las calles.

Molina apuntaba que “parece que venimos de una pandemia en la pasada Semana Santa”. No dejó de lado la gran ilusión que se respira de cara a esta Semana Santa, aunque también subrayó que la ciudad ya se está preparando para la Magna Mariana del 20 de septiembre, un evento que unirá la provincia con la capital. Por ello, afirmó que “están todos los condicionantes para que sea un año tan especial”.

De la misma forma, Rafael Domínguez comentó que “la pena de los cofrades empieza cuando no salimos a la calle”. Quiso transmitir que, para él, lo vivido el año pasado fue como un abrir y cerrar de ojos, tan rápido que casi no tuvo tiempo de asimilarlo. A pesar de ello, destacó que tiene la moral intacta, y su objetivo es llegar bien preparado a la Semana Santa, puliendo todos los detalles para que todo salga a la perfección.

Francisco Feria y Eduardo Sugrañes llegaron a la misma conclusión de que es un verdadero placer contar con el año que estamos viviendo y seguir disfrutando de todo lo que está por venir. Feria, como párroco de la Parroquia de San Pedro, no dejó de lado la gran labor que realizan las hermandades durante todo el año. Eso sí, quiso dejar claro que la Semana Santa se vive de igual forma tanto dentro como fuera de los templos. Argumentó este hecho con unas palabras similares a la famosa sevillana rociera, de forma adaptada a la Semana Santa: “Para ser buen cofrade, primero hay que ser cristiano”.

La cosa iba cogiendo forma, y Eduardo Sugrañes, que agradeció a Huelva Información tantos años de trabajo y por contar con él en esta primera tertulia, consideró sobre el tema a tratar, que “hay que tomarse esto un poco más relajado”, haciendo referencia a la manera en que últimamente se viven las cofradías, un tanto acelerada y cargada de presión.

La regulación de las salidas

Ya sabemos que, en el último año, la regulación de las salidas por parte de la Diócesis de Huelva ha abierto más de un debate en las principales redes sociales y en mentideros cofrades de la ciudad. Si una hermandad quiere realizar una salida extraordinaria, debe mandar una solicitud que tiene que estar argumentada con un 25º aniversario, o múltiplo de veinticinco, de coronación canónica o de la erección de una hermandad.

En base a este tema, el padre Feria argumentó que se ha “perdido el encanto de lo extraordinario”, haciendo referencia a que lo ordinario se aprovecha para realizar un acto de manera novedosa o fuera de fecha, perdiendo la esencia de lo verdaderamente especial. Por lo que recordó que “era necesario tomar unas pautas”.

Ignacio Molina, como buen cofrade, mencionó que por este tema ha nacido alguna que otra Magna, dejando claro cómo la regulación ha dado lugar a eventos de gran envergadura. Eso sí, dejó claro que para el bienestar de la ciudad es necesario saber limitar todas estas salidas, buscando un equilibrio que permita disfrutar de lo extraordinario sin saturar el calendario.

“Puede llegar un momento en el que nos cansemos”, apuntó también Eduardo Sugrañes, ya que para él tanta salida extraordinaria podría llegar a aburrir a la Huelva cofrade. Y no solo eso: también recordó que es fundamental aprender a disfrutar de la cofradía en la calle.

La tertulia, en todo momento en tono afable y con buen ritmo, dejó más aportaciones de peso. Ignacio Molina tampoco dejó de lado la falta de espontaneidad que se vive con los pasos en la calle. “Hay una revirá de un paso y parece que está todo medido, junto a las marchas calculadas”, comentó sobre la excesiva planificación, que puede restarle naturalidad a lo que se está viviendo.

Las nuevas hermandades

Una dinámica que viene siendo habitual en los últimos años en la ciudad es la creación de nuevas hermandades o asociaciones civiles. Estas asociaciones, generalmente impulsadas por jóvenes, buscan rendir culto a una imagen, ya sea cristífera o mariana, pero sin seguir el camino tradicional bajo la guía de un párroco o una parroquia. Un tema sobre el que los tertulianos expresaron su malestar, ya que en muchas ocasiones, la ideología de estas asociaciones no tienen mucho fundamento, alejándose de los principios y valores que tradicionalmente han guiado a las hermandades.

Rafael Domínguez sostuvo que “como cofrades y cristianos debemos parar las asociaciones piratas de alguna manera”. De esa forma, quiso dejar claro que a estas personas hay que guiarlas, enseñándoles el buen camino y el buen hacer de las hermandades de la ciudad.

“A estos grupos les da igual absolutamente todo”, respondió Ignacio Molina a los argumentos de Rafael. Además de eso, se dejó claro que aunque a los responsables se les escucha y se valoran sus ideas, su camino no conduce a ningún lado si no se rige por los principios de la iglesia. Según Molina, “no hay forma de pararles”.

Francisco Feria, como servidor de la Iglesia y predicador de la palabra de Dios, quiso cerrar la tertulia afirmando que “es imposible frenar a estas asociaciones por todas sus ideas y mentalidad”, reconociendo de esta manera la dificultad de controlar estos movimientos.

¡Pararse ahí!

La tertulia dejó claro que los cofrades de Huelva viven un año ilusionante. Con el deseo de recuperar los momentos, tras la incertidumbre meteorológica del 2024 y con la mirada puesta en la esperada Magna Mariana del 20 de septiembre.

A lo largo del encuentro, se vió una tertulia cargada de reflexiones y buenos argumentos, donde se puso claro la pasión con la que Huelva vive la Semana Santa.