¡Venga agua ahí!

Huelva/RANCIO: ¡Buenas tardes, Guasa! Oye, ¿qué te pasa que te veo blanco como el palio de la Paz?

- GUASA: Hombre, Rancio, cómo voy a estar… ¿Tú estás viendo el agua que está cayendo estos días? Estamos cada vez más cerca de la Semana Santa de Venecia. ¡Me vuelvo a temer lo peor otro año!

- RANCIO: Hermano, piensa que estas gotas solo son las lágrimas de Nuestra Madre y Señora de los Dolores, que dentro de nada, desde su incomparable palio en la Concepción, anticipará la Pasión de Nuestro Señor…

- GUASA: No me empieces con las homilías que, en ese plan, yo prefiero a la Virgen de los Ángeles, que ni tiene lágrimas en su cara, ni falta que le hace. De hecho, para mí le sobra hasta la corona, Rancio. Además, esto ya está aquí y quiero calentar motores el día 22 en El Polvorín.

- RANCIO: ¿Y eso, Guasa? ¿Algún tipo de retiro cuaresmal? ¿Vas a acompañar al Cristo de la Sangre en su visita a la prisión?

- GUASA: ¿Qué cárcel ni qué retiro, hombre? Hay una convivencia polvorinera en su Barrio Obrero para preparar la Semana Santa con cervecitas y una buena paella entre amigos, como dice el cartel.

- RANCIO: ¿Preparar la Semana Santa? Yo pensaba que uno se preparaba para los días de la Pasión en la iglesia, con los cultos de cada cofradía, ¿no? A veces creo que desde las mismas hermandades confundimos al personal… Yo iré al Polvorín pero para acompañar al Cristo del Amor en el viacrucis oficial, que así creo yo que se prepara mejor el espíritu para lo que está por venir.

- GUASA: Hablando de cultos, me ha parecido ver buenos montajes en los distintos besamanos, ¿no? Buenas priostías tenemos ya en Huelva, Rancio…

- RANCIO: Pues me alegra que me saques el tema, Guasa. Me quedo con el besapié del Cristo de las Cadenas, ante la atenta mirada de la Madre, Reina capitular de la servita y mercedaria.

- GUASA: Cómo se nota que ya estamos enfilando el domingo del pregón, Rancio. ¡cómo te embalas! Y ya que te veo tan poético, entiendo que irás al pregón oficial de Fernando Romero, ¿no?

- RANCIO: Quiero ir, sí señor, seguro que hace un pregón muy onubense, tal como es él. Una pena que tantos cofrades de Huelva prefieran pasar este día tan señalado en otras ciudades… En fin, que cada uno haga lo que le dicte su corazón. Tú serás de los que emigran ese día, ¿no Guasa?

- GUASA: Hombre, no es por mí, es que a mi chiquillo le encanta ver la mudá de la Borriquita al Salvador y vivir un ambiente cofrade güeno… No te enfades, Rancio, que en Huelva ese día está perdido, aquí no hay ná.

- RANCIO: Ayyy… Bueno, vete a Sevilla, que los buenos cofrades de aquí iremos a misa tempranito, para vernos luego en el Gran Teatro y después compartir la comida del pregón rodeado de los cofrades de verdad, los que trabajan día a día por sus hermandades y por ende, la Semana Santa onubense. En fin, nos veremos antes de la Semana Mayor, ¿no?

- GUASA: ¡Claro que sí! Y a ver si cambia el tiempo un poco que entre la catastrófica Semana Santa del año pasado y tal como vamos de agua en esta… ¡Vaya tela, Rancio, vaya tela! Menos mal que seguiremos viendo pasos en las extraordinarias y la Magna.

- RANCIO: ¡Ea, lo que faltaba! Ya estamos asimilando que se puede alargar la Semana Santa a todo el año. ¡Tremendo!