La innovación llega a la joyería

Brug es una startup granadina que ofrece un sistema innovador que permite disfrutar de joyas y relojes de diferentes marcas sin tener que comprarlas. Los clientes que se abonen a la plataforma podrán elegir entre varios planes de suscripción que van de 29 a 59 euros al mes, cada uno con un número de productos a elegir y un valor de joyero diferente. Una vez elegidas las piezas, la empresa realiza el envío de forma gratuita al domicilio indicado por el cliente. Éste podrá disfrutarlas durante un mes para luego devolverlas, elegir nuevamente otras joyas o relojes, y disfrutarlos en el siguiente periodo. El servicio, que no tiene compromiso de permanencia, cuenta con seguro antirrobo, aplica medidas de higiene mediante ultrasonidos antes y después del uso de las piezas, y se encarga del mantenimiento de las mismas. La startup está siendo acelerada en El Cable, el espacio almeriense de Andalucía Open Future, la iniciativa de emprendimiento basado en la innovación de Junta de Andalucía y Telefónica, que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Almería.

Brug no se queda en un solo probador de joyas y relojes, también ofrece un servicio de venta con descuentos para aquéllos que se enamoren de alguna pieza y quieran obtenerla con la seguridad de haberla probado previamente, y así tomar una decisión de compra premeditada y acertada. “Creemos que el hecho de poseer algo se aleja cada vez más del ideal social de libertad que se fragua desde hace años. Las personas cada vez viajan más, viven en distintos países y no quieren sentirse atadas a sus pertenencias, sienten como una carga el hecho de transportar cada propiedad que tiene. Incluso sin cambiar de ciudad o lugar de residencia, la moda va muy unida a un estilo de vida fresco y dinámico”, señala Helena Gorlat, miembro de Brug.

Desde el inicio, sus tres integrantes, Sergio Megías, CEO de Brug, Borja Cuevas, técnico informático y desarrollador web, y Helena Gorlat especialista en comunicación, basan su modelo de negocio en la venta de suscripciones mensuales y el uso de la economía circular.

Como tantas otras startups, Brug se encuentra en un punto crucial dentro de su fase de desarrollo: poder llegar al cliente final de forma masiva. Para ello cuentan con una primera versión operativa de su plataforma brug.club. Próximamente, tienen previsto presentarse a una ronda de financiación de la que esperan salir exitosos, para poder ampliar el equipo y mejorar sus canales de difusión digital.