Viaje monumental por Zalamea la Real

Zalamea la Real/Zalamea la Real te ofrece un maravilloso viaje en el tiempo a través de sus más emblemáticos elementos monumentales. La Historia ha llenado de encanto esta antigua localidad onubense, proporcionando a cuantos nos visiten un amplio recorrido artístico y cultural, además de la consiguiente degustación de los más exquisitos manjares de la tierra.

Disfruten de todo ello, de plazas y plazoletas, de los altozanos típicos de la arquitectura popular del entorno, de callejuelas estrechas y llenas de encanto, de fuentes y pilares que harán más refrescante su paseo, y del sabor de una localidad que ancla sus orígenes en la Alta Edad Media, ha ido forjando su espacio físico en concordancia con la experiencia que ofrece su historia.

Conjunto dolménico de El Pozuelo

Es de los grupos megalíticos de carácter funerario más peculiares y significativos de la Península Ibérica, datados entre el 2800 y el 3000 a. C. Su visita resulta imprescindible.

Mina de Chinflón

Una de las minas metalúrgicas subterránea más antigua de Europa. De ella se extraían Cobre a partir de la Malaquita en el periodo Calcolítico inicial.

Grabados Rupestres de Los Aulagares.

Grabados sobre grandes piedras circulares (rocas riolitas que afloran en el lugar), pertenecientes al arte esquemático megalítico. Datan de 1.800 y 1.500 a.C.

Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción (XVI)

Por su historia, por sus características arquitectónicas y por su imponente presencia, la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción se ha convertido en uno de los emblemas de la localidad.

Ermita del Santo Sepulcro (XVIII)

En 1776 comienza la construcción del edificio cuyo objetivo era albergar la última estación del vía crucis zalameño que se celebra en la noche del Viernes Santo: la Vía Sacra.

Ermita de La Divina Pastora (XVIII).

Originaria del siglo XVI, a mediados del siglo XVIII se había colocado una imagen de la Divina Pastora a expensas de Fray Miguel de Zalamea, misionario apostólico y guardián del convento de Marchena.

Ermita de San Vicente (XV)

El edificio se comenzó a construir en el mismo año de la elección del santo y de la redacción de las reglas de la cofradía, en 1425.

Ermita de San Blas (XV)

Se trata de una de las ermitas más antiguas, junto con la de san Vicente, de Zalamea la Real (siglo XV). Antaño se le dió culto a Sta. María de Ureña, cuya devoción fue sustituida posteriormente por la de San Blas.

Ayuntamiento

La documentación histórica indica que el edificio del Concejo zalameño ya se ubicaba, compartiendo las funciones con el local del Pósito. El 1 de enero de 1931 se inaugura el nuevo Consistorio.

Plaza de Toros

En 1878 la sociedad de “Los Arrepentidos” solicito al ayuntamiento un solar para construir una Plaza de Toros, el lugar asignado fue el del antiguo corralón. La Plaza se inauguró en junio de 1879.

Mercado de Abastos

Este edificio modernista - industrial de tres naves, con rasgos propios de la arquitectura colonialista inglesa, fue inaugurado el 21 de Septiembre de 1904.

Casa Cilla

Nos encontramos ante un edificio cuyo origen lo hallamos en el siglo. XVIII. Actualmente alberga el Museo Etnográfico de Zalamea la Real.

Plaza de Talero

En 1890 se inauguró esta plaza añadiendo en el centro de la misma un busto sobre peana del diputado de Bujalance, Don Juan Talero y García, defensor de la causa antihumista promovida por los pueblos de la comarca minera.

Otros lugares de interés

Altozanos: elevaciones del terreno para salvar el desnivel pronunciado entre la calle y el acceso a algunos domicilios.

El Jardín: En la primera década del siglo XX se inicia su construcción en la antigua Plazuela de la Calle Don Juan Díaz González.

Humilladeros. A la entrada (o salida) de la localidad se colocan este tipo de elementos arquitectónicos propios de los siglos XV a XVIII. Lugares devotos para el rezo de los caminantes que salían o entraban en la localidad.

Casas solariegas. Ejemplo destacado de del paso del tiempo por la localidad son las fachadas de las casas solariegas que ornan el centro urbano de Zalamea la Real. Arquitectura propia de los siglos XVII y XVIII.