Vídeo: El proceso de fabricación tras el Samsung Galaxy Z Flip

De la fábrica al punto de venta, un largo y complejo proceso resumido en apenas un minuto. Es lo que muestra el vídeo publicado por Samsung sobre su Galaxy Z Flip, su último y novedoso teléfono, presentado hace una semana en San Francisco y Londres y cuyo primer lote se agotó ya en el periodo de preventa.

Una bisagra oculta, una interfaz diferente y una pantalla de 6,7 pulgadas (de cristal ultra-delgado plegable con una relación de aspecto 22:9) que se pliega hasta recordar una polvera para caber en la palma de la mano, o en el bolsillo.

La bisagra permite aperturas fijas en distintos ángulos, de forma similar a como lo hace un ordenador portátil, y el Modo Flex, desarrollado en colaboración con Google, hace que la pantalla se divida en dos cuando está abierto, para ver contenidos en la parte superior mientras se realizan otras acciones en la parte inferior.

En la pantalla exterior, de una pulgada, se pueden recibir notificaciones y también hacer selfies sin necesidad de abrir el teléfono. Y su ventana multiactiva hace posible la multitarea, de forma similar a como funciona la pantalla partida en teléfonos más tradicionales.

El Samsung Galaxy Z Flip cuesta 1.500 euros y a España llega en dos colores (Mirror Purple y Mirror Black), con 8 GB de memoria RAM y 256 GB de almacenamiento interno. Aunque se haya agotado la primera remesa, la compañía trabaja para poner a la venta en los próximos días más unidades.