Una vez más, Huelva se tendrá que echar a la calle para reclamar las infraestructuras que nunca llegan y que lastran desde hace décadas el desarrollo socioeconómico de la provincia e hipoteca el futuro de las siguientes generaciones.

En esta ocasión ha sido la plataforma ciudadana ‘¿Y Huelva Cuándo?’ la que ha decidido dar un paso adelante y convocar una concentración para este jueves a las 20:00 horas en la Plaza de Las Monjas de la capital onubense.

Las reivindicaciones que exponen son la decenas de obras prometidas a lo largo de los años a la sociedad onubense que nunca han llegado. Son infraestructuras ferroviarias, de carreteras, hídricas, sanitarias, eléctricas… infraestructuras de las que ya gozan desde hace muchos años otras provincias españolas de menor población o relevancia económica o estratégica y que los onubenses se siguen preguntando por qué no llegan, se preguntan ¿Y Huelva Cuándo?

La convocatoria de este jueves viene precedida de diversos acontecimientos que han ocurrido en los últimos meses y que han supuesto el detonante para que se intente una nueva movilización en defensa de las infraestructuras.

A la permanente indignación por la situación en la que se encuentran las carreteras y las líneas férreas de la provincia, han ocurrido tres hechos fundamentales que han desembocado en la protesta.

La Diputación de Huelva, con la nueva presidencia de David Toscano, encargó al Consejo Económico y Social de la provincia de Huelva (CESpH) un análisis pormenorizado de las carencias en infraestructuras. Se le encargó a un órgano independiente y se creó una Mesa por las Infraestructuras en la que todas las sensibilidades, partidos políticos e instituciones estuvieran presentes con voz y voto.

Y se votó y salieron seis propuestas irrenunciables, las que más votos tenían. El desdoble de la carretera 435, la alta velocidad Sevilla-Huelva, el aeropuerto, las infraestructuras eléctricas, la presa de Alcolea y la conexión con la Sierra, reconociendo en el propio informe que son muchas más pero que se priorizaban éstas por el propio voto de los participantes.

En el libro blanco, todavía por aprobar, se exponen hechos, se asignan tareas y se encomienda a los representantes institucionales su defensa.

El segundo hecho relevante fue el anuncio por parte de la Unión Europea de que se descartaba hasta 2050 la construcción de un tren de alta velocidad que uniera Sevilla-Huelva-Faro, una vieja reivindicación onubense y andaluza a la que ahora se le ponía fecha y se descartaba para los próximos 25 años.

El tercer hecho fueron las declaraciones que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, realizaba en Sevilla el pasado 8 de abril sorprendiendo a los onubenses al anunciar que Huelva y la capital hispalense estarían conectadas en 50 minutos. Un par de líneas dentro de un discurso y de una sucesión de inversiones en Andalucía por parte del Gobierno central.

La alegría de la noticia de que un presidente del Gobierno de España hablase de una inversión en Huelva para mejorar el tren se transformó en dudas ya que esos 50 minutos no correspondían con ninguno de los seis estudios de trazado de alta velocidad para Huelva en los que en todos se baja de la media hora.

Según los propios convocantes de la manifestación, las dudas que dejó el presidente se transformaron en indignación tras las palabras del ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, en las que proponía a Andalucía un cambio de la inversión del metro de Sevilla por el AVE a Huelva y aseguraba que llevar la alta velocidad a la capital onubense supondría “una inversión bestial” de 1.100 millones de euros, muy por debajo de las que se están haciendo en el resto de España.

Un nuevo error en el tren que conectaba Madrid con Huelva, que se desvió hacia Málaga, la persistencia en las declaraciones del ministro y la ratificación del Parlamento Europeo en la fecha de 2050 sin que el Gobierno español protestara, hicieron el resto.

Desde la plataforma se insiste en que el detonante de la manifestación es el AVE por lo ocurrido en los últimos meses y porque son conscientes de que o ahora cambia el Gobierno de España su posición sobre Huelva o pasarán 25 años sin alta velocidad.

Desde ¿Y Huelva cuándo? se insiste en que tan importante o más que el AVE son las infraestructuras hídricas como la presa de Alcolea o el canal de Trigueros, las sanitarias como el hospital materno infantil o el chare de Lepe, las conexiones a la sierra por carretera o tren, el aeropuerto o la mejora de las instalaciones eléctricas ante las industrias de hidrógeno verde que están por venir.

Prometen movilizarse ante cualquier retraso que supongan estos proyectos pero reconocen que la protesta del AVE tiene una fecha de caducidad, es ahora o dentro de 25 años.