Ignacio Caraballo dimite como secretario general del PSOE de Huelva

Ignacio Caraballorenunciará a la secretaría general provincial del PSOE de Huelva. El dirigente abandonará así sus responsabilidades orgánicas dentro de la estructura socialista onubense. La decisión comunicada a la formación llega 24 horas después de que anunciase su dimisión como presidente de la Diputación Provincial de Huelva.

Se renuncia, según el escrito presentado por el propio Ignacio Caraballo al que ha tenido acceso Huelva Información, iba a ser efectiva mañana en la reunión de la Comisión Ejecutiva Provincial, si bien "no será posible por la suspensión de la misma, dada la entrada en vigor en el día de hoy del Decreto del Presidente 8/2020 de 29 de octubre", por el que se establecen las medidas para contener las infecciones del Covid-19. En el escrito, Caraballo agradece "su colaboración y apoyo a toda la Ejecutiva Provincial, y lógicamente de manera muy especial a todos los militantes de mi formación política".

Caraballo ostentaba la secretaría general del PSOE de Huelva desde 2012, cuando accedió al cargo en sustitución de Mario Jiménez. En el Partido Socialista fue secretario de Política Municipal entre 2004 y 2008, y secretario de Organización hasta 2012. Debido a esta dimisión de Ignacio Caraballo, la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE iniciará los procedimientos internos oportunos que están previstos en estos casos.

Ignacio Caraballo tiene tiene 67 años cumplidos, de los que lleva 36 afiliado al PSOE y a la UGT. En 1991 fue elegido alcalde de su pueblo, Chucena, en el Condado onubense, a cuyo frente ha estado 17 años ininterrumpidos, y en el que se mantiene como concejal. Con José Cejudo como presidente, accedió en 2003 a la vicepresidencia de la Diputación, en la que siguió después con Petronila Guerrero hasta 2011, cuando la sucedió al frente de la institución. También ha sido durante años presidente del Patronato Provincial de Turismo.

Su marcha de la política activa, según señaló el propio Caraballo en un comunicado emitido ayer, es “profundamente meditada”, “prevista hace ya bastante tiempo”, y realizada como “un ejercicio de responsabilidad”. No obstante, denunció que "la decisión se ha acelerado por una “campaña de acoso constante” a la que dice que ha sido sometido en los últimos meses, con “consecuencias muy dolorosas” para él y su familia. Lo cierto es que los acontecimientos se han precipitado en los últimos días, después de que, justo ahora una semana atrás, se supiera que había sido denunciado por un supuesto caso de violencia de género.